Las importaciones de autopartes a Estados Unidos batieron récord de enero a agosto de 2023, al totalizar 125,901 millones de dólares, de acuerdo con datos del Departamento de Comercio.
Estas compras externas han registrado una tendencia a la recuperación en los últimos tres años, tras su desplome derivado de la pandemia de Covid-19.
Antes, en 2019, las importaciones estadounidenses de autopartes fueron de 105,570 millones de dólares, hasta entonces el máximo histórico.
Pero en 2020, estos flujos cayeron a 80,228 millones de dólares.
La pandemia produjo una crisis económica escala mundial y un confinamiento masivo conforme el virus golpeaba a las naciones, lo que propicio un menor uso de automóviles y el descenso pronunciado de ventas automotrices.
Luego las importaciones estadounidenses de partes automotrices crecieron a 107,748 millones de dólares en 2021 y 120,847 millones en 2022.
Importaciones de autopartes
La empresa PARTS iD, enfocada al comercio digital integral para el mercado de repuestos y accesorios para automóviles, describe que el mercado automotriz de posventa en Estados Unidos es enorme, fragmentado y listo para la disrupción a medida que las preferencias generales de los consumidores se están desplazando cada vez más hacia las transacciones en línea.
En Estados Unidos, el mercado de repuestos para automóviles continúa teniendo una tendencia ascendente a pesar de las presiones económicas de la inflación.
Según Hedges & Company, se proyecta que la industria de repuestos para automóviles livianos alcanzará los 374,000 millones de dólares en 2023, lo que incluye repuestos y servicios.
También proyecta que toda la industria del mercado de repuestos y cuidado del automóvil, incluidas las piezas y servicios de servicio mediano y pesado, alcanzará 497,000 millones de dólares en 2023.
Las perspectivas son mixtas, según el Informe SEMA Future Trends 2023 de Market Research (el “Informe SEMA”) publicado en enero de 2023.
En 2021, la demanda de repuestos especializados para el mercado de repuestos fue fuerte y algunas empresas registraron las mejores ventas de su historia.
Las ventas minoristas alcanzaron un récord de 50,900 millones de dólares, más de 6% con respecto a 2020.
Esto fue a pesar de los desafíos inminentes en el horizonte que se materializaron más en 2022, como el aumento de la inflación y los desafíos de la cadena de suministro, los cuales llevaron a menores inventarios y precios más altos.