El pronóstico de importaciones de pollo de México para 2019 es de 850,000 toneladas y para 2020 de 870,000, según proyecciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
Las importaciones son una forma de satisfacer la creciente demanda de productos avícolas que la producción mexicana no puede satisfacer.
Estados Unidos continúa siendo el principal exportador de carne de pollo a México, con el 86% de la cuota de mercado. Las principales importaciones desde Estados Unidos son patas de pollo y carne deshuesada mecánicamente (MDM, por su sigla en inglés).
Mientras tanto, Brasil se ha convertido en la segunda fuente más importante de carne de pollo para México, proporcionando principalmente pechugas congeladas (sin hueso y en hueso) y alas.
Aunque la participación de Brasil en el mercado aún es pequeña, de 12.7%, su participación ha crecido 77% desde 2016.
Si bien los procesadores mexicanos prefieren productos frescos, están ajustando sus procesos industriales para usar o mezclar productos congelados.
Sin embargo, a pesar de que la participación de los Estados Unidos ha bajado desde el 90% de las importaciones totales en 2016, continúa representando alrededor del 86% de las importaciones de México en los últimos dos años.
Pollo, su consumo en México
El pronóstico para el consumo de carne de pollo en 2019 es de 4.4 millones de toneladas en el mercado mexicano.
Para 2020 es de casi 4.6 millones de toneladas, ya que continúa la fuerte demanda de los consumidores y la industria de procesamiento.
Las aves de corral siguen siendo la proteína animal preferida para el consumidor mexicano, debido a que es la proteína más asequible para las clases económicas bajas y medias.
Las aves de corral representan el 60% del consumo de proteínas animales de los consumidores en México.
Los consumidores continúan viendo a las aves de corral como una fuente saludable de proteínas.