La industria de autopartes de Estados Unidos ha registrado pérdidas de cientos de millones de dólares por el alza de aranceles a las importaciones de acero y aluminio impuestas por esa nación, afirmó la Asociación de Fabricantes de Motores y Equipos (MEMA, por su sigla en inglés).
La MEMA representa a más de 1,000 proveedores de componentes y sistemas para automóviles de pasajeros y camiones pesados empleados en unidades nuevas como usadas y también como partes de posventa para dar servicio, mantener y reparar los vehículos en la carretera.
Los fabricantes de componentes para vehículos de motor son el empleador directo más grande en empleos de manufactura en Estados Unidos y emplean a más de 871,000 trabajadores en los 50 estados. Esto representa un crecimiento de 19% en ese país durante los últimos cinco años.
“Desde principios de este año, nuestra industria ha pagado cientos de millones de dólares en aranceles sobre el acero importado. Además, nuestros miembros están reportando un aumento del 50% en el precio del acero nacional”, arguyó Ann Wilson, vicepresidente senior de asuntos gubernamentales de MEMA en un testimonio a la Comisión de Comercio Internacional.
En consecuencia, la MEMA pidió que Estados Unidos exima a México y Canadá de las tarifas de la Sección 232 sobre acero y aluminio.
Caso de empresa de autopartes
A principios de este otoño, uno de los miembros de la MEMA, North American Stamping, declaró ante el Comité de Finanzas del Senado que han experimentado aumentos en los precios del acero, superando los 10 millones anuales.
Para absorber estos costos, North American Stamping ya ha reducido las horas extras y suspendió o redujo drásticamente todas las contrataciones, los gastos de capital y los gastos discrecionales.
“Eximir a México y Canadá de las tarifas de la Sección 232 sobre el acero y el aluminio refuerza el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y, a su vez, fortalecerá la base de fabricación de los Estados Unidos”, concluyó la Asociación.