Tras inaugurar su nueva planta de ejes para el Modelo Q5 de Audi en San José Chiapa, Puebla, la empresa alemana ThyssenKrupp anunció que invertirá 284 millones de dólares en los siguientes cuatro años en México.

La planta, que requirió una inversión de 10 millones de dólares, se encuentra al interior del parque industrial de Audi y producirá componentes para alrededor de 150,000 autos al año.

ThyssenKrupp informó que prevé construir otras tres plantas en México que iniciarán operaciones en el 2020.

México ha atraído inversiones para la producción de autos de alta gama, lo mismo de las empresas alemanas BMW, Volkswagen (Audi) y Daimler (Mercedes-Benz), que de la japonesa Nissan (Infiniti) y la estadounidense Ford (Lincoln MKZ).

Para la industria automotriz mexicana, esta historia de éxito comenzó en 2012, cuando Volkswagen dio a conocer sus planes para construir una planta de Audi en San José, Chiapa, Puebla, donde producirá el modelo Q5 comenzando en 2016, con una inversión de 1,300 millones de dólares.

Martín Schmidti, director general de ThyssenKrupp Automotive Systems, dijo que se instalarán ocho líneas de ensamble en Puebla y en San Miguel de Allende, Guanajuato, para hacer una entrega “justo en secuencia”, con un promedio de 214 minutos desde el requerimiento hasta el uso en la ensambladora.

ThyssenKrupp prevé vender alrededor de 300 millones de dólares anuales una vez que alcance su nivel máximo de producción, dijo Jorge Sánchez, director de Operaciones de la división Automotive Systems de la firma.

Algunos de los componentes que producirá son los ejes traseros y delanteros para el modelo Audi Q5. También hará el sistema de frenos delanteros de la unidad.

La fábrica, construida en una superficie de 5,771metros cuadrados con 160 empleados, se sumará a las 10 que opera la empresa en México, tanto del sector automotriz como de otras industrias.

Según la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), México producirá 5.2 millones de vehículos en el 2020.