El Instituto de la Cerveza de Estados Unidos informó que está en contra de que se fijen cupos de importación al aluminio.
Primeramente, sobre la base de las preocupaciones sobre el exceso de capacidad global y ciertas prácticas comerciales, en abril de 2017, la Administración del presidente Donald Trump inició las investigaciones de la Sección 232 sobre las importaciones de acero y aluminio de los Estados Unidos.
A partir del 23 de marzo de 2018, el presidente Trump aplicó aranceles de 25 y 10%, respectivamente, sobre ciertas importaciones de acero y aluminio.
Por ahora, el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que se firmará esta semana, no ha resuelto ni abordado los aranceles de la Sección 232 sobre acero y aluminio importados de Canadá y México, a la vez que se han dado versiones de que el gobierno estadounidense quiere remplazar esos aranceles por cupos.
Aunque el Instituto de la Cerveza representa tanto a los cerveceros nacionales como a los importadores, la participación de la cerveza nacional en el volumen de cerveza en ese país fue del 83.2% en 2017.
“No apoyamos cuotas en lugar de aranceles. Las cuotas limitan el crecimiento. La venta de cerveza en latas de aluminio ha crecido en los últimos años. Más del 60% de la cerveza fabricada y vendida en este país se envasa en latas de aluminio y botellas de aluminio”, dijo James A. Mc Greevy III, presidente y director ejecutivo del Instituto de la Cerveza a la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos.
Mercado de la cerveza
En general, la industria de la cerveza representa 1.9% del PIB de Estados Unidos, paga más de 3,500 millones de dólares en impuestos federales sobre el consumo y respalda más de 2.2 millones de empleos.
“Instamos a la Comisión a recomendar la eliminación de los aranceles en todo el aluminio procedente de Canadá o México”, dijo Greevy III.
Ya un análisis del Instituto de la Cerveza sobre el impacto de las tarifas de aluminio en la industria cervecera nacional muestra que la industria enfrenta más de 347 millones de dólares en costos adicionales anualmente y que más de 20,000 empleos están en riesgo.
