Dada la urgencia manifiesta del presidente estadounidense, Donald Trump, y los procedimientos legales establecidos, la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) arrancará el próximo 16 de agosto.
Oficialmente, la administración de Trump informó este jueves al Congreso su intención de renegociar el TLCAN, con lo cual inició un período de consulta de 90 días en el Congreso, tras lo cual se dará luz verde para ello.
En una primera reacción, la Secretaría de Economía dijo que el gobierno de México se “congratula” por esta notificación al Congreso estadunidense y que espera un proceso “constructivo” en la redefinición de las nuevas reglas de los flujos de comercio e inversión entre México, Estados Unidos y Canadá.
La notificación pudo darse tras un largo proceso para ratificar al representante de Comercio estadounidense, Robert Lighthizer, quien fue nominado el 3 de enero para ser juramentado en su cargo apenas el lunes pasado, siendo el último alto funcionario del gabinete de Trump en entrar en funciones.
Adicionalmente, como parte de las condiciones para que Trump pudiera hacer la notificación, Lighthizer concluyó dos días de reuniones con los comités de Finanzas del Senado y de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes, así como con grupos especiales de asesores comerciales compuestos por legisladores de ambas cámaras.
“Los países de América del Norte merecen un instrumento moderno que regule su relación comercial. El acuerdo trilateral ha sido de inmenso beneficio para todas las partes. México espera un proceso de negociación constructivo, que permita aumentar la cooperación y la integración económicas y fomentar la competitividad regional”, dijo la Secretaría de Economía, en un comunicado.
Desde el 1 de febrero, el gobierno mexicano anunció el arranque de un proceso formal de consultas con el sector privado y otros actores relevantes en México por un periodo de 90 días sobre los cambios al TLCAN.
El proceso de consulta en México ha sido coordinado por la Secretaría de Economía, a través de los mecanismos ordinarios establecidos. Durante el mismo, según la dependencia, se ha tenido una participación activa del Senado de la República, conforme a las facultades que le corresponden en materia de política exterior.
También Canadá destacó avances en su propio mecanismo de consulta para las modificaciones al TLCAN, que entró en operación en enero de 1994, fecha a partir de la cual los tres países iniciaron un proceso de 14 años para eliminar gradualmente miles de barreras con miras a tener una integración regional. A la fecha, prácticamente todos los productos comercializados entre la región no pagan aranceles.
“En los meses recientes, con respecto al TLCAN, mis colegas y yo hemos estado escuchando a los canadienses en todo el país y de todos los sectores y contextos”, comentó este jueves, Chrystia Freeland, ministra de Relaciones Exteriores de Canadá.