La recaudación obtenida en el Régimen de Incorporación Fiscal (RIF) de México fue de 6,662 millones de pesos en 2017, informó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
El número de contribuyentes inscritos en ese régimen sumó 4 millones 975,385.
Para simplificar y promover la formalidad de las personas físicas que realizan actividades empresariales, se creó el RIF, constituido como un régimen temporal que ofrece descuentos graduales en el pago del Impuesto Sobre la Renta (ISR) a los contribuyentes que opten por él durante 10 años.
Este régimen sustituyo al desaparecido Régimen de Pequeños Contribuyentes, conocido como REPECOS, y se propuso con el objetivo de combatir la informalidad.
En el texto de ley, el Régimen no es tan atractivo como sí lo es cuando se incorporan los beneficios de las resoluciones misceláneas, así como los diversos decretos, según el Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM).
Los estímulos otorgados por este concepto fueron de 27,108 millones de pesos durante 2017. Con respecto al año previo, la recaudación del RIF se incrementó 18% real, explicado principalmente por el crecimiento del ISR.
Los contribuyentes del Régimen de Incorporación Fiscal utilizan el aplicativo “Mis Cuentas” para registrar sus operaciones de ingresos, gastos y emitir facturas.
El RIF funciona como un punto de entrada a la formalidad para las empresas y sus trabajadores. El objetivo es buscar que las empresas y personas físicas informales se vuelquen a la formalidad permitiéndoles una incorporación paulatina al pago de impuestos sobre la renta. Así, se les ofrece un calendario escalonado de hasta 11 años, sin pagos el primer año, y que se va incrementando anualmente en 10 puntos porcentuales, hasta llegar al pago de la totalidad del ISR.