La Unión Europea y México se fijaron tres objetivos enfocados al comercio internacional, las empresas y los consumidores como parte de las nuevas regulaciones que establecerán en el Tratado de Libre Comercio entre ambos (TLCUEM).

El nuevo pacto comercial fijará reglas horizontales que se aplican a cualquier comercio hecho por medios electrónicos, teniendo así implicaciones que van más allá del comercio de servicios.

Las disposiciones pretenden cumplir tres objetivos principales: eliminar los obstáculos injustificados al comercio por medios electrónicos, dar certeza jurídica a las empresas y garantizar un entorno en línea seguro para los consumidores.

El primer objetivo se aborda mediante disposiciones que prohíben la imposición de derechos de aduana sobre las transmisiones electrónicas y la prohibición de los procedimientos de autorización que se dirigen específicamente a los servicios en línea por razones proteccionistas.

El objetivo de brindar seguridad jurídica a las empresas se aborda en disposiciones que garantizan la validez legal y el efecto de los contratos electrónicos y de autenticación electrónica y servicios fiduciarios (como firmas electrónicas o certificados digitales) y que impiden solicitar acceso al código fuente propiedad de la empresa.

Finalmente, el TLCUEM actualizado contendrá disposiciones para mejorar la confianza del consumidor en línea al garantizar reglas de protección transparentes y efectivas en el entorno en línea, al impedir la propagación del «spam» y al asegurar que los consumidores tengan acceso abierto a Internet.

El capítulo incluye una cláusula de revisión en la cual se establece que las Partes deberán volver a evaluar, dentro de los tres años posteriores a la entrada en vigor del acuerdo, la necesidad de incluir disposiciones sobre la libre circulación de datos.

Al interior de las políticas de la Unión Europea, su iniciativa para el mercado único digital constituye un paso importante para mejorar el funcionamiento en esta esfera. Por este motivo, la Comisión Europea ha indicado que la finalización del mercado único digital es una de sus 10 máximas prioridades.

De acuerdo con la Comisión Europea, el mercado único digital puede generar oportunidades para empresas que inician sus actividades y compañías ya existentes en un mercado de más de 500 millones de personas.

Completar el mercado único digital puede aportar 415,000 millones de euros anuales a la economía de Europa, generar puestos de trabajo y mejorar la prestación de servicios, según estimaciones del gobierno comunitario.

Un mercado único digital inclusivo ofrece también oportunidades a los ciudadanos, siempre que posean los conocimientos adecuados. El mayor uso de las tecnologías digitales puede mejorar el acceso de las personas a la información y ampliar sus oportunidades de empleo. También puede promover una administración pública abierta y moderna.