La Unión Europea ha implementado una serie de cambios para facilitar el comercio exterior y destaca entre ellos la ventanilla única de importación (IOSS).
En materia aduanera, las nuevas normas sobre el comercio electrónico en la Unión Europea suprimieron la exención de minimis del IVA sobre la importación de envíos de escaso valor.
Para facilitar ese cambio, se introdujo la IOSS con el fin de simplificar la declaración y liquidación del IVA sobre las ventas a distancia de estos envíos.
Además, de acuerdo con la Organización Mundial de Comercio (OMC), durante los últimos tres años se siguieron aplicando varios sistemas informáticos para facilitar los procedimientos aduaneros, y se espera que los demás sistemas estén en funcionamiento para 2025.
El Reglamento sobre el entorno de ventanilla única de la Unión Europea para las aduanas entró en vigor en 2022.
Simultáneamente, los aranceles de Nación Más Favorecida (NMF) aplicados no han variado mucho y los tipos de los derechos siguen siendo sustancialmente los mismos; el promedio aritmético de los tipos arancelarios fue de 6.5%, pero los tipos del sector agropecuario siguieron siendo en promedio tres veces superiores a los de los productos no agropecuarios.
La ventanilla única de importación
El número de líneas arancelarias sujetas a derechos no ad valorem siguió siendo significativo, en torno a 10% de todas las líneas.
A la vez, se establecieron ciertas medidas temporales sobre las importaciones, como la suspensión de determinados derechos, para beneficiar a Ucrania en respuesta a la guerra.
El comercio exterior de mercancías de la Unión Europea está dominado por las importaciones de productos primarios y las exportaciones de maquinaria y equipo de transporte.
También las estadísticas sobre las cadenas de valor mundiales también demuestran que lo más habitual es que los diferentes Estados miembros de la Unión Europea se suministren entre sí, lo que realza los beneficios del mercado único.
En particular, la economía de la Unión Europea se ha visto especialmente afectada por los efectos combinados de la pandemia de Covid-19 y la guerra en Ucrania.
En comparación con otras grandes economías, la Unión Europea se ha visto más afectada por su dependencia de las importaciones de energía, la proximidad a la zona en conflicto y la mayor exposición a las cadenas de valor del comercio y los productos financieros.
Los Estados miembros de la UE situados más al este son cada vez más vulnerables debido a su dependencia energética, las exportaciones de servicios y la exposición de los activos.