Las exportaciones de Japón aumentaron 38% a tasa interanual en abril, a 7 billones 181,113 millones de yenes.
Al revés, las importaciones japonesas fueron por 6 billones 925,789 millones de yenes, un avance de 12.8% anual.
De ese modo, el país obtuvo un superávit de 255,324 millones de yenes.
Ambas vías de flujos comerciales muestran, por el lado de las exportaciones de Japón, el repunte de los mercados internacionales, y por el lado de las importaciones, la mejoría de su mercando interno.
Las bases de comparación son relativamente bajas, por los efectos de la pandemia de Covid-19.
En cuanto a las perspectivas por componente de demanda japonesa, es probable que el ritmo de crecimiento de las exportaciones de bienes se desacelere por el momento, principalmente de bienes relacionados con el sector automotriz, afectados por factores como la escasez de semiconductores.
Dicho esto, el Banco de Japón proyecta que las exportaciones de bienes continúen aumentando con firmeza, apoyadas en una recuperación global de la inversión fija empresarial, la expansión de la demanda relacionada con lo digital y la adopción de políticas macroeconómicas agresivas, principalmente en las economías avanzadas.
En general, las exportaciones de Japón han seguido aumentando, lo que refleja una recuperación de las economías de ultramar.
Exportaciones de Japón
Por regiones, el ritmo de aumento de las exportaciones a las economías avanzadas se ha desacelerado, afectado principalmente por un repunte de la demanda reprimida y la escasez de semiconductores, ambos relacionados con la industria automotriz.
Entre tanto, las exportaciones a las economías emergentes se han incrementado con firmeza, sobre todo las destinadas a Asia, apoyadas por la expansión de la demanda relacionada con lo digital.
Por bienes, el ritmo de crecimiento de las exportaciones de bienes relacionados con el automóvil se ha estabilizado recientemente, afectado principalmente por un repunte de la demanda reprimida y una escasez de semiconductores.
Las exportaciones de Japón relacionadas con la tecnología de la información han aumentado claramente, porque la demanda se ha mantenido firme para una amplia gama de productos, incluidos los relacionados con teléfonos inteligentes y computadoras personales, así como piezas para centros de datos y equipos de a bordo para vehículos de motor.
Al fin, las exportaciones de bienes de capital han aumentado, en parte respaldadas por un aumento global en la inversión en maquinaria y por las exportaciones firmes de equipos de producción de semiconductores que reflejan la expansión de la demanda relacionada con la tecnología digital.