Las personas físicas y las empresas pueden invertir en bonos, acciones de empresas, divisas o metales preciosos, entre otras opciones, pero ¿porqué invertir en bienes raíces?

Para tener un panorama completo, se debe tomar en cuenta primero que los mercados de capitales son donde se emiten y negocian valores como acciones y bonos.

Los instrumentos del mercado de capitales incluyen acciones, también llamadas participaciones, que se refieren a la propiedad de una empresa; bonos, también llamados títulos de renta fija o de deuda, que se refieren al endeudamiento o acreedor de una empresa o entidad gubernamental; valores de activos digitales, que se refieren a representaciones digitales de valor en forma de valores; y acciones de fondos de inversión, que son vehículos de inversión mancomunados que consolidan el dinero de los inversores.

Todas estas son opciones amplias para un inversionista. Un ejemplo para su dimensión: como segmento principal del sistema financiero, los mercados de capital proporcionan las mayores fuentes de financiamiento para las empresas no financieras estadounidenses. Los mercados de capitales de Estados Unidos proporcionaron 75.4% del financiamiento de las empresas no financieras en 2021, según datos del Congreso estadounidense.

Dentro de este mercado, la industria de gestión de activos gestiona colectivamente el dinero de casi la mitad de todos los hogares estadounidenses.

La industria ha experimentado períodos de alto crecimiento, atribuible en gran medida a la mayor dependencia de los inversores minoristas de los administradores de activos para que inviertan su dinero por ellos en lugar de invertirlo ellos mismos.

En las inversiones de renta fija, un inversionista puede optar, a manera de ejemplo, por los bonos del Tesoro en Estados Unidos o los Cetes en México, con una rentabilidad fija, acordada desde el inicio de la compra.

Pero en algunos casos, las inversiones en renta fija están sujetas al riesgo de crédito, es decir, al riesgo de que el emisor de un bono no pague puntualmente los intereses y el principal, o de que la percepción negativa de la capacidad del emisor para efectuar dichos pagos haga bajar el precio de ese bono en el mercado antes de ser liquidado.

O bien, los inversionistas pueden invertir en acciones con potencial crecimiento, como la empresa estadounidense de autos eléctricos Tesla en Estados Unidos o la mexicana FENSA, que continúa extendiendo sus franquicias de OXXO a nivel internacional, por citar dos casos.

Aun así, las acciones de las empresas cotizan con altibajos, con un mayor riesgo frente a los títulos de renta fija y, por consiguiente, hay un mayor margen al alza o riesgo a la baja en las ganancias.

Otra opción son las inversiones en productos derivados. Un derivado es un contrato que deriva su valor de un activo subyacente en un momento designado en el tiempo.

Por ejemplo, los derivados pueden estar vinculados a productos físicos (como trigo, ganado, petróleo u oro), índices bursátiles o tasas de interés.

El valor de un derivado fluctúa a medida que cambia el valor del activo subyacente o el precio futuro esperado.

Los compradores y vendedores de derivados no están obligados a poseer los activos subyacentes. Los derivados vienen en varias formas diferentes, incluidos futuros, opciones y swaps.

Como un botón de muestra, New Fortress Energy, una empresa global integrada de infraestructura de gas, adquirió recientemente posiciones en derivados que se utilizaron para reducir los riesgos de mercado asociados con las tasas de interés y los tipos de cambio.

Una opción más está en los metales precios. La compañía Xtra-Gold refiere que los precios del oro cerraron 2022 en 1,814 dólares la onza, justo por encima de la media de 2022 de 1,801 dólares la onza.

Los precios del oro fueron fuertes a principios de 2022, y cayeron a lo largo del año, registrando el mínimo de 2022 en noviembre. Xtra-Gold proyecta indicadores positivos para los precios del oro en el futuro.

Al oro le va bien en tiempos de incertidumbre. Los niveles de endeudamiento nacional, empresarial e individual aumentan esta incertidumbre y dejan menos margen para gestionar con seguridad cualquier posible crisis.

Invertir en divisas es una alternativa adicional. Las subidas de los tipos de interés a lo largo de 2022 reforzaron el dólar estadounidense como refugio seguro, alcanzando su valor máximo en 20 años en septiembre de 2022.

Pero al reconocer la Reserva Federal que el proceso de desinflación ha comenzado, se cree que la mayor parte del ciclo de endurecimiento ha concluido. Como resultado, se espera que la fuerza comparativa del dólar estadounidense se reduzca en 2023.

Las empresas de gestión de activos, también conocidas como empresas de gestión de inversiones o administradores de activos, son empresas que administran dinero a cambio de una tarifa con el objetivo de hacer crecer el dinero para quienes invierten con ellas.

El producto más conocido que crean estas empresas son los fondos de inversión. Existen muchos tipos de fondos de inversión, incluidos fondos mutuos, fondos cotizados en bolsa, fondos de cobertura, capital privado y capital de riesgo.

Sus prácticas comerciales y los tipos de requisitos regulatorios a los que están sujetos están lejos de estar estandarizados.

Los fondos de inversión se diferencian, entre otras cosas, por el perfil de riesgo de los activos, el acceso de los inversores, las operaciones de las empresas de cartera y la facilidad para comprar o vender sus acciones.

En particular, los fondos de capital de riesgo son fuentes de financiación inicial para empresas en etapa inicial y de alto crecimiento, como las nuevas empresas de tecnología.

Según la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), en el segundo trimestre de 2022, más de 2,000 fondos de capital riesgo gestionaban alrededor de 330,000 millones de dólares en activos.

Aunque el tamaño de las inversiones de capital de riesgo parece pequeño en comparación con el tamaño total de los mercados de capital estadounidenses (que supera los 100 billones de dólares), la industria desempeña, no obstante, un papel clave en la financiación de emprendedores que llevan a cabo innovaciones.

También los inversionistas pueden invertir sus ahorros en un banco, normalmente a una tasa fija establecida y en un plazo determinado, aunque con ganancias relativamente bajas.

 Finalmente, ¿por qué invertir en bienes raíces? Toda inversión implica un riesgo, pero hacerlo en este sector es una de las opciones más seguras si hace con conocimiento.

Invertir en bienes raíces ofrece potenciales oportunidades, lo mismo para las personas que quieren dejar de depender de un salario, que para empresas con gran capital.