Estados Unidos y China fueron los principales orígenes de las importaciones a México en 2020.
Por mucho, estos dos países concentraron 63.1% de todas las compras externas mexicanas.
Estados Unidos aportó 43.9% de las mismas, o 168,224 millones de dólares.
Por su parte, China abarcó 19.2%, o 73,608 millones de dólares, según datos de la Secretaría de Economía.
De acuerdo con la OCDE, el crecimiento económico de México durante las últimas décadas ha sido impulsado por políticas de comercio e inversión abiertas, crecimiento de las exportaciones y una participación cada vez mayor en las cadenas globales de valor.
El país ha emergido progresivamente como un gran centro en los sectores de manufactura, automotriz, electrónica y servicios financieros, y las empresas multinacionales de estas industrias se han trasladado o han invertido en México.
Tanto su proximidad a Estados Unidos, como su integración con la economía estadounidense a través del comercio, ha sido un motor de la transformación económica del país.
Importaciones a México
México depende cada vez más de las exportaciones de manufacturas y comercia principalmente con Estados Unidos, aunque también han crecido sus flujos comerciales con China.
Más recientemente, México exportó productos a China por un valor de 5,325 millones de dólares de enero a julio de 2021, lo que representó un alza interanual de 32.9% y un récord.
Mientras México se ha beneficiado en cierta medida de la demanda de materias primas de China, ha estado compitiendo con esa nación en la exportación de productos manufacturados, como la electrónica.
En la primera mitad de año actual, destacaron las exportaciones mexicanas al mercado chino de minerales de cobre por 1,857 millones de dólares (un aumento de 67.4%), minerales de plomo por 391 millones (un alza de 119.7%) y cajas de velocidades por 132 millones (un avance de 112.9 por ciento).
Por su parte, México ha incrementado su integración con Estados Unidos y ha puesto en vigor, junto con Canadá, el T-MEC desde julio de 2020, un tratado de libre comercio en endureció la reglas de origen del sector automotriz, obligando a un mayor contenido regional.
Otros orígenes destacados de las importaciones a México fueron: Corea del Sur (14,691 millones de dólares), Japón (13,888 millones), Alemania (13,868 millones), Taiwán (8,750 millones), Canadá (8,302 millones), Vietnam (6,614 millones) y Brasil (5,496 millones).