Los teléfonos, las computadoras y los circuitos electrónicos integrados fueron los principales productos exportados por China en 2022, según datos de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Pero las exportaciones chinas de estos tres productos registraron caídas interanuales de -8, -8 y -1%, respectivamente.
Con esos resultados, las ventas externas desde China de teléfonos fueron de 238,000 millones de dólares en 2022, las correspondientes de computadoras totalizaron 188,000 millones y las de circuitos electrónicos integrados se cifraron en 155,000 millones.
La República Popular China (RPC) es la segunda economía más grande del mundo por producto interno bruto (PIB), una posición que ha ocupado desde 2010.
Si bien el consumo y los servicios han sido un énfasis en sus políticas industriales, el gobierno de la RPC continúa preservando la inversión y la manufactura como los principales componentes de su economía, refiere el Departamento de Comercio de Estados Unidos.
Productos exportados
La economía de la RPC es más grande que las de las siguientes cuatro economías (Japón, Alemania, el Reino Unido e India) combinadas.
Su provincia más grande, Guangdong, tiene un PIB nominal mayor que el de Canadá. O bien, el delta del río Yangtze, centrado alrededor de Shanghai, tiene un PIB aproximadamente del tamaño de Alemania.
Otros productos chinos exportados que destacaron en 2022 fueron: diodos y transistores (66,000 millones de dólares, +35%), acumuladores eléctricos (57,000 millones, +70%) y partes para tractores (50,000 millones, +9 por ciento).
La lista de los 10 principales productos exportados se completa así: triciclos, scooters y carros con pedales de juguete (48,000 millones de dólares, +5%), aceites de petróleo excepto crudo (48,000 millones, +49%), transformadores eléctricos (47,000 millones, +20%), aparatos de alumbrado (46,000 millones, -7 por ciento).
Después de casi 30 años de crecimiento sin precedentes, la República Popular China enfrenta ahora una economía en desaceleración, indica Riverbridge Growth Fund.
El mercado inmobiliario, que muchos observadores creían que estaba inflado, ha comenzado a declinar.
Los gobiernos locales, que se habían endeudado mucho para impulsar el crecimiento, enfrentan una gran carga de deuda y fuentes de ingresos limitadas.
Como resultado, la demanda de exportaciones chinas por parte de Estados Unidos y países de Europa, y la demanda de importaciones chinas de dichos países, pueden debilitarse debido a los efectos de un crecimiento económico más limitado.
Además, las acciones chinas para reclamar islas en disputa han dañado las relaciones con los socios comerciales regionales de China y podrían causar más interrupciones en el comercio regional e internacional.
