China, Estados Unidos, Alemania, Italia y México fueron los principales importadores de robots industriales en 2022.
Los robots industriales han estado disponibles comercialmente y se han utilizado en entornos industriales y de fabricación durante muchas décadas.
Por lo general, son máquinas grandes y estacionarias diseñadas para automatizar tareas repetitivas en un entorno controlado (por ejemplo, una línea de montaje de una fábrica) que requieren velocidad y fuerza mayores que las que un ser humano puede lograr.
Para las tareas de fabricación, los robots industriales generalmente ejecutan planes mediante programación de memoria (funciones que son programadas de antemano por un ingeniero humano).
En 2022, las importaciones chinas de robots industriales registraron una caída interanual de 10%, a 1,375 millones de dólares.
Otros importadores destacados de robots industriales fueron, según la OMC: Estados Unidos (540 millones de dólares, +6% interanual), Alemania (423 millones, -3%), Italia (259 millones, +25%) y México (194 millones, +44 por ciento).
Con el tiempo, los robots industriales se han vuelto más sofisticados. Sarcos Technology and Robotics Corporation indica que los robots industriales han experimentado una adopción generalizada en una serie de aplicaciones y han ganado aceptación en muchas industrias.
Sin embargo, la empresa agrega que estos robots industriales pesados generalmente requieren que se configuren espacios de trabajo a su alrededor y grandes jaulas de seguridad para proteger a los trabajadores en la fábrica, consumen cantidades significativas de energía y espacio, son sustancialmente menos ágiles y versátiles que los humanos y son difíciles y costosos de trasladar. un lugar a otro.
Robots industriales
Estas características suelen limitar el número de casos de uso a tareas altamente rutinarias.
Como resultado, dos nuevas categorías de productos, llamados robots colaborativos o cobots y robots móviles automatizados o AMR, están ganando terreno en el mercado.
Los avances en tecnologías tangenciales como pinzas, sistemas de visión, computación en la nube, realidad aumentada o AR e inteligencia artificial o IA han llevado a una adopción más amplia y a la viabilidad comercial de los cobots y los AMR.
Estos avances han ofrecido una mayor seguridad y flexibilidad operativa, lo que ha permitido que los robots se implementen de forma segura junto con los humanos, revolucionando la industria histórica de la robótica industrial y los mercados laborales, al tiempo que ofrecen capacidades más avanzadas que los modelos anteriores.
Sin embargo, Sarcos Technology and Robotics Corporation expone que ni los cobots ni los AMR están diseñados para realizar tareas en entornos dinámicos o no estructurados, especialmente al aire libre.
Al igual que sus predecesores, son herramientas de automatización, diseñadas y programadas para realizar tareas rutinarias.
Por lo general, también carecen de destreza humana y de la capacidad de levantar y manipular objetos pesados.