Varios beneficios del nearshoring para Estados Unidos se aclaran conforme surgen desafíos logísticos y de cadenas de producción.
¿Cómo se adapta Estados Unidos a ello? ¿Qué papel juegan México y Canadá? ¿Por qué esta tendencia continuará? A continuación, parte de las respuestas.
De acuerdo con un informe del Senado estadounidense, el nearshoring (deslocalización) puede mejorar la proximidad y la fiabilidad de las cadenas de suministro, aprovechando la sólida alianza que ya existe entre Estados Unidos, México y Canadá.
Un paso atrás: la pandemia de Covid-19 expuso la fragilidad del comercio mundial al causar perturbaciones masivas en el transporte marítimo y las cadenas de suministro mundiales, incluso en el caso de insumos críticos como los semiconductores.
Beneficios del nearshoring para Estados Unidos
General American Investors Company destaca que las empresas reinvierten por tres razones: mantener sus activos productivos, aumentar la producción para satisfacer la creciente demanda y reemplazar la mano de obra con automatización mediante software y hardware para reducir los costos.
Una cuarta medida ya está en marcha. Se trata de la relocalización o nearshoring de la producción para reducir la dependencia de cadenas de suministro lejanas. Un problema clave se dio durante la pandemia, cuando los países emplearon estrategias diversas para enfrentar sus efectos. La relocalización puede impactar los márgenes de ganancia. Sin embargo, estos efectos se mitigan si se mejoran los precios o se logran reducir los costos.
Logística
Otros acontecimientos en todo el mundo, como la invasión rusa de Ucrania, los ataques de los rebeldes hutíes a los buques de carga en el mar Rojo y la sequía en el Canal de Panamá, han provocado retrasos recientes en el transporte marítimo.
Los conflictos, el cambio climático y los desastres naturales podrían causar más perturbaciones en el mercado mundial del transporte marítimo en el futuro.
Según el mismo informe, la deslocalización de la producción a Canadá y México proporcionará cierta protección contra futuras perturbaciones del transporte marítimo y el comercio mundial.
La alianza entre los tres países tiene sus raíces en décadas de cooperación económica y se rige por un acuerdo de libre comercio.
Los aranceles preferenciales incluidos en el Tratado entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC) pueden hacer que la deslocalización sea una opción atractiva para muchas empresas.