En total, Maersk tiene ahora 19 buques encargados, incluido un buque alimentador de 2,100 TEU de capacidad que se botará en 2023, y 18 grandes buques oceánicos de 16,000-17,200 TEU de capacidad, cuya entrega está prevista para 2024 y 2025.

Además, Maersk informó que continuó invirtiendo en su transición hacia el combustible ecológico en 2022, encargando seis buques duales adicionales que pueden navegar con metanol ecológico.

Según la propia empresa, garantizar la disponibilidad de combustibles ecológicos a gran escala es el mayor reto para las ambiciones de descarbonización de Maersk.

Por consiguiente, la empresa argumenta que en 2022 se anunciaron nueve asociaciones estratégicas con memorandos de entendimiento que sientan las bases para garantizar unos 5 millones de toneladas de metanol verde para 2030.

Estas asociaciones son fundamentales para ampliar la escala de los nuevos combustibles en términos de capacidad de producción, tecnología e innovación del modelo empresarial.

Las emisiones de Maersk procedentes de los buques oceánicos bajo su control financiero (Alcance 1) y las emisiones anteriores y posteriores de las actividades relacionadas con los océanos en su cadena de valor (Alcance 3) son la mayor fuente de emisiones de gases de efecto invernadero de la empresa.

Hay dos palancas clave para mitigar las emisiones relacionadas con los océanos de Maersk: mejorar la eficiencia del combustible y la transición a buques que operen con combustibles verdes.

Los combustibles ecológicos se definen como combustibles o energías que, en comparación con los combustibles fósiles, tienen emisiones de gases de efecto invernadero bajas (65-80% menos) o muy bajas (80-95% menos) en su ciclo de vida.

Maersk

La empresa ha hecho progresos sustanciales en la última década en la mejora de la eficiencia del combustible, reduciendo la intensidad de las emisiones en cerca de 43% entre 2008 y 2020.

A pesar de la reducción en el consumo de combustible, mantener el impulso en la intensidad de carbono en 2022 resultó difícil debido a la congestión portuaria post-pandémica y a la escasez de capacidad, que tensaron y ralentizaron las cadenas de suministro mundiales.

Maersk siguió invirtiendo para alcanzar sus ambiciosos objetivos. La empresa firmó nueve acuerdos de colaboración en materia de combustibles ecológicos en 2022, con la intención de abastecerse de al menos 750,000 toneladas de combustible ecológico al año para 2025.

En septiembre de 2022, Maersk anunció la compra de seis nuevos buques verdes habilitados para metanol, que se suman a los 13 ya en cartera de pedidos. El primer buque ecológico con metanol hará su viaje inaugural en 2023.