Mattel concentra sus ventas con Walmart, Target y Amazon y esa vinculación expone a la empresa al riesgo de un efecto material adverso.

La empresa es un líder mundial en entretenimiento para niños que se especializa en el diseño y producción de juguetes y productos de consumo de calidad.

A nivel mundial y durante 2020, los tres clientes más grandes de Mattel (Walmart con 1,070 millones de dólares, Target con 620 millones y Amazon con 470 millones) representaron aproximadamente 47% de las ventas netas consolidadas.

También existe, dentro de los países del segmento Internacional, una concentración de ventas a ciertos grandes clientes que no operan en Estados Unidos, ninguno de los cuales superó el 10% de las ventas netas consolidadas a nivel mundial.

Los clientes y el grado de concentración varían según la región o la nación.

Mattel

En 2020, los 10 clientes más grandes de la empresa, en conjunto, representaron aproximadamente 54% de las ventas netas.

Esta concentración expone a Mattel al riesgo de un efecto material adverso si uno o más de sus grandes clientes redujeran significativamente las compras por cualquier motivo, favorecieran a los competidores o nuevos participantes, o aumentaran su competencia directa con Mattel al expandir su negocio de marcas privadas.

Dicho riesgo se ha visto exacerbado por la pandemia de Covid-19, que ha resultado en una mayor dependencia de sus clientes más importantes debido al cierre forzoso o voluntario de tiendas por parte de sus clientes minoristas especializados.

Los clientes no asumen compromisos vinculantes a largo plazo con Mattel con respecto a los volúmenes de compra y realizan todas las compras entregando órdenes de compra únicas.

Asimismo, los productos dentro del segmento de América del Norte se venden directamente a minoristas, incluidos minoristas omnicanal, tiendas de descuento y jugueterías independientes, cadenas de tiendas, grandes almacenes, otros puntos de venta minorista y, hasta cierto punto, mayoristas.

También la empresa opera pequeños puntos de venta al por menor en ciertas oficinas corporativas como un servicio para sus empleados y como un punto de venta para sus productos.

Los productos dentro del segmento Internacional se venden directamente a minoristas y mayoristas en la mayoría de los países europeos, latinoamericanos y asiáticos, y en Australia y Nueva Zelanda, y a través de agentes y distribuidores en aquellos países donde la empresa no tiene presencia directa.