El presidente de México, Enrique Peña Nieto, instruyó a realizar los procesos necesarios para que el país firme acuerdos bilaterales con Australia, Brunei, Malasia, Nueva Zelanda, Singapur y Vietnam.
“El presidente ya me dio la instrucción para que convierta el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP) en acuerdos bilaterales con todos los países con los que no tenemos convenios de libre comercio”, dijo Ildefonso Guajardo, secretario de Economía (SE).
El funcionario difundió por primera vez esta orden en una reunión que sostuvo el jueves de la semana pasada con empresarios de la Cámara Americana de Comercio (Amcham) en Washington, DC.
Guajardo expuso que la indicación se la dio Peña Nieto el 23 de enero, el mismo día en que definió los 10 objetivos que buscará el Gobierno de México en la negociación con Estados Unidos, bajo la premisa de construir una nueva etapa de diálogo y negociación en la relación bilateral.
“Yo he venido trabajando desde hace cuatro años en diversificar y abrir los puentes de comercio que tengo con otros países”, les dijo Guajardo a los empresarios de la Amcham.
Firmado el 4 de febrero, el TPP está por integrado por Australia, Brunéi, Canadá, Chile, Estados Unidos, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam. El presidente estadounidense, Donald Trump, inició el proceso para sacar a su país de este bloque, lo que se formalizó.
Guajardo afirmó en noviembre que México, Australia, Japón, Malasia, Nueva Zelanda y Singapur buscarían ratificar el TPP, más allá de lo que decidiera Estados Unidos.
En forma defensiva, uno de los sectores de mayor sensibilidad para México es el agropecuario, dado que Australia y Nueva Zelanda ocupan posiciones relevantes en el comercio internacional de varias materias primas, sobre todo los lácteos.
En el TPP, por ejemplo, México se comprometió a abrir cupos a la importación de productos lácteos y aceite de palma en forma gradual hasta alcanzar las 60,625 toneladas anuales a partir del año 11 de la entrada en vigor de ese acuerdo.
Por el contrario, de manera ofensiva, México tiene oportunidades para incrementar sus exportaciones de productos manufacturados a ese grupo de seis naciones, principalmente en el sector automotriz.
El TPP abriría a México nuevos mercados, cuyas importaciones de autos suman más de 20,000 millones de dólares anuales. Ello representa la suma de las compras externas de automóviles que realizaron Australia, Nueva Zelanda, Malasia y Vietnam, países con los que México no cuenta con tratados de libre comercio (TLC), y tampoco los tiene con Singapur y Brunéi, pero ambos quitaron unilateralmente sus aranceles.
Singapur podría beneficiarse con una mayor certidumbre para invertir en industrias como la energética, la turística y la de la infraestructura en México; mientras que Vietnam representa un competidor manufacturero para los empresarios mexicanos en ciertas áreas, como en textil, calzado y prendas de vestir.