México registró una baja interanual de 36.7% en sus exportaciones de becerros y vaquillas a Estados Unidos de enero a junio de 2022, a 394,565 cabezas.
La producción de ganado proporciona una actividad económica vital para la gran extensión de tierra no cultivable en México, y Estados Unidos es el principal mercado de exportación.
Las exportaciones de ganado mexicano fluctúan estacionalmente, dependiendo de las condiciones climáticas y de la disponibilidad de forraje para el pastoreo.
Así, las exportaciones de ganado tienden a alcanzar su punto máximo a principios de la primavera (febrero-marzo) y a finales del otoño (octubre-noviembre), cuando las condiciones de forraje se deterioran.
De acuerdo con el Departamento de Agricultura estadounidense, México exporta ganado de engorde y de cebo de menor peso, ya que Estados Unidos tiene la ventaja comparativa de alimentar al ganado y de criarlo con los forrajes disponibles.
Aunque los ganaderos mexicanos se enorgullecen de exportar ganado a Estados Unidos, los precios internacionales de la carne de vacuno siguen siendo cada vez más atractivos, mientras que la demanda interna también crece.
Exportaciones de becerros
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos afirma que los ganaderos mexicanos engordan sus animales en México para su sacrificio y obtienen mejores ganancias al acomodar diferentes cortes de carne en diferentes mercados, en lugar de exportar animales vivos.
Este fenómeno es un acto de equilibrio entre ser etiquetado como exportador de ganado vivo y obtener un precio diferenciado de la carne de vacuno en otros mercados.
La mejora de la calidad, combinada con la mejora de la situación sanitaria en varias regiones y una demanda generalmente fuerte de ganado mexicano en Estados Unidos, ha llevado a un aumento de las exportaciones de más Estados mexicanos.
Después de exportar 1 millón 293,335 cabezas a Estados Unidos en 2019, México embarcó a ese mismo destino 1 millón 418,093 cabezas en 2020 y 1 millón 081,949 cabezas en 2021, según estadísticas de la Secretaría de Agricultura.
México se divide en cuatro zonas climáticas: árida, semiárida, templada y tropical. Las zonas tropicales pueden dividirse a su vez en trópico húmedo y trópico seco.
En general, el ganado se produce prácticamente en todos los ambientes climáticos de México, y los sistemas de producción y los costos dependen del clima.
La productividad de cada sistema de producción de ganado -o los costos para lograr un determinado nivel de productividad- varía de una región a otra.