México canceló los permisos vigentes de exportación de azúcar a Estados Unidos para evitar sanciones ante una «absurda» interpretación de convenios que regulan el comercio de edulcorantes entre ambos países, de acuerdo con un documento del que Reuters obtuvo copia.
El documento, una circular interna enviada por la cámara azucarera a ingenios en México el lunes y a la que Reuters tuvo acceso a través de dos fuentes, revela que el Departamento de Comercio de Estados Unidos (DOC) hace una interpretación equivocada de una cláusula de los llamados «acuerdos de suspensión», firmados por ambos países a fines del 2014.
En el 2000, Estados Unidos impidió el uso de cupos de importación de azúcar originaria de México, como lo establece el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), aunque sí permitió el libre comercio de este producto a partir de 2008.
Pero a finales de 2014, los dos países llegaron a los “acuerdos de suspensión”, ante el riesgo de que el gobierno estadounidense pudiera fijar cuotas compensatorias a las importaciones de azúcar mexicana, tras haber iniciado investigaciones por dumping y subsidios.
Los convenios obligan a México a vender a un precio mínimo de 0.2357 dólares la libra de azúcar refinada y a 0.2075 dólares el azúcar sin refinar; limita los envíos de azúcar refinada a no más del 53% del total de exportaciones en cada año, es decir al menos 47% deber ser azúcar en bruto, y el volumen se fija anualmente en función de las necesidades previstas de Estados Unidos.
«Los funcionarios de bajo nivel del DOC, en una lectura muy legalista pero absurda de los Acuerdos, interpretan que no se debe exportar antes del 31 de marzo el 55% del estimado de WASDE (estimado mundial de abasto y demanda) de diciembre y que es un número muy bajo que pone a México ya en violación de los Acuerdos», según el informe.
El escrito señala que esta interpretación significa que México sólo podría exportar en los primeros seis meses del ciclo el 40% del cupo asignado por Estados Unidos, provocando una concentración de las exportaciones restantes, el 60%, en el segundo semestre del ciclo.
Ante esto y debido a que la Secretaría de Economía (SE), encargada de la política de comercio exterior, no tiene aún contrapartes en el DOC para resolver el problema y para evitar sanciones por una posible violación de los «acuerdos de suspensión» la secretaría decidió cancelar los permisos, informó el documento.
«En virtud de que la SE no puede resolver el tema con el DOC, ya que no han sido nombrados los funcionarios encargados de tomar decisiones, los abogados en Washington de la SE insistieron en enviar comunicado al DOC reconociendo el problema y cancelando los permisos de exportación vigentes, a fin de que se reexpidan a partir del 1º de abril», agregó el documento.