México desplazó a los Países Bajos como el mayor exportador de tomate del mundo en 2018, con ventas externas por 2,261 millones de dólares, un récord. Pero este logro se basa en una dependencia prácticamente total con su vecino del norte, a quien envía 99.7% de sus exportaciones.

También el tomate es el tercer producto agrícola de exportación de México después de la cerveza y el aguacate; 1 de cada 2 tomates que se consumen en ese país, son de origen mexicano.

De acuerdo con datos de la Secretaría de Economía, la industria de tomate ha realizado inversiones significativas desde la implementación del TLCAN para convertirse en un sector altamente competitivo.

Pero Estados Unidos impuso cuotas compensatorias de 17.5% a las importaciones de tomates originarias de México a partir de este martes, mientras las negociaciones bilaterales para renovar un acuerdo al respecto continúan.

Consecuentemente, la imposición de este arancel preliminar podría resultar en la desviación de comercio de México hacia otros países que cuenta con acceso preferencial en su acceso a los Estados Unidos.

Asimismo, según datos de la Universidad de Arizona, los consumidores de tomate de los Estados Unidos resultarán afectados, pues tendrán que enfrentar un incremento de precios de entre 38 y 70% como resultado de la terminación del Acuerdo y de la aplicación de derechos compensatorios provisionales.

Sector del tomate

La producción y exportación de tomate apoya el empleo directo de más de 400,000 trabajadores agrícolas, que en su mayoría son migrantes quienes van acompañados de sus familias, dijo la Secretaría de Economía en un comunicado. En las zonas de cultivo de tomate se ofrecen oportunidades de educación para los hijos de los jornaleros y también acceso a la salud para sus familias.

A la vez, la producción de tomate también genera, en al menos 17 Entidades Federativas, un millón de empleos adicionales en industrias relacionadas con la cadena de soporte, logística, servicios, entre otras.

Demanda en EU

El consumo per cápita en el mercado estadounidense ha pasado de 12 libras a principios de los años 1980, a un promedio de casi 21 libras entre 2010-2017.

En general, el Acuerdo de Suspensión, durante más de dos décadas, permitió regular el acceso del tomate mexicano, en un mercado con una creciente demanda y ofreció a los consumidores estadounidenses y a las industrias que utilizan al tomate como insumo, allegarse a una mayor variedad de tomates, de mejor calidad y a menores precios.