México se ubicó en el lugar 51 en el Índice de Competitividad Global 2016–2017 del Foro Económico Mundial (WEF, por su sigla en inglés), con lo que avanzó seis peldaños frente al reporte del año anterior.
La economía mexicana obtuvo una calificación general de 4.41 en una escala del 1 al 7. Ésta es la mejor posición y calificación de México desde 2006, año en que el WEF implementó la metodología de evaluación actual.
La clasificación estuvo encabezada por Suiza, seguida de Singapur, Estados Unidos, Holanda, Alemania, Suecia, Reino Unido, Japón, Hong Kong y Finlandia.
El reporte analiza la competitividad a partir de 114 variables agrupadas en 12 pilares: instituciones, infraestructura, ambiente macroeconómico, salud y educación primaria, educación superior y capacitación, mercado de bienes, mercado laboral, mercado financiero, disponibilidad tecnológica, tamaño del mercado, sofisticación empresarial, e innovación.
México mejoró en ocho de los 12 pilares que conforman el índice, se mantuvo sin cambios en dos y descendió en otros dos.
México hiló por segundo año un avance en materia de competitividad y se ubicó como la tercera economía más competitiva de América Latina, detrás de Panamá y Chile. Con respecto a los países BRIC, México superó a Brasil (81), mientras que China, India y Rusia se ubicaron en las posiciones 28, 39 y 43, respectivamente.
La calificación registrada para México recoge la opinión del empresariado sobre múltiples factores asociados a la competitividad del país que fueron encuestados por el WEF entre marzo y mayo de 2016 y que integra el 70% de los datos del índice y el 30% restante se obtiene de información publicada por organismos internacionales. Con 304 encuestas respondidas, México continúa siendo el tercer país con mayor participación en el ejercicio, sólo superado por Estados Unidos y China.