Con un comercio anual superior a los 1,000 millones de dólares, México se encamina a tener su tercer déficit en la balanza comercial de artículos de joyería y sus partes, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía.

México no había registrado un déficit en el comercio de estos productos al menos desde los últimos 15 años concluidos en el 2013, pero en el 2014 reportó un saldo negativo de 4 millones de dólares y en el 2015 lo incrementó a 36 millones de dólares.

Ubicado como el primer productor de plata y el octavo de oro a nivel mundial, México es tradicionalmente joyero, con los principales centros de producción establecidos en Guadalajara y la Ciudad de México.

De enero a agosto del presente año, las exportaciones mexicanas de joyería y sus partes fueron por 275 millones de dólares y las importaciones por 287 millones, lo que implicó un déficit de 12 millones.

Según PromPerú, el organismo gubernamental que promueve el comercio exterior y las inversiones de Perú, entre los productos más vendidos de joyería de metales preciosos en México destacan los anillos de boda y compromiso, así como dijes con figuras religiosas en oro y plata, y los pendientes de oro entre las jóvenes mexicanas.

La Cámara Minera de México (Camimex) previó a principios de año que en el 2016 habría una mayor demanda en joyería, debido al nivel relativamente moderado de precios y a otros factores. Pero esto no se ha visto reflejado en el comercio internacional de México.

Las exportaciones mexicanas de joyería y sus partes escalaron 20% en el 2014 y luego 4% al año siguiente; pero descendieron 10% en el periodo de enero a agosto del año en curso, a tasas anuales y en valor.

A su vez, las importaciones mexicanas de estas mercancías aumentaron 26% en el 2014 y avanzaron 10% en el 2015. De enero a agosto del año en curso, no obstante, descendieron 20 por ciento.

En el 2015, Estados Unidos captó 91% de las exportaciones mexicanas de joyería, seguido por otros países como Canadá, Reino Unido y Suiza.