Estados Unidos y México pactaron garantizar 10 años de protección a los datos de medicamentos biológicos.
La medida forma parte de los cambios que ambos países acordaron realizar al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Los medicamentos biológicos son preparados médicos derivados de organismos vivos y están demostrando valiosas fuentes de tratamientos para enfermedades como la artritis y el cáncer. Como en cualquier otro caso, una vez vencida la protección de los datos, terceras empresas pueden producir medicamentos genéricos.
El periodo de protección de los datos de productos biológicos fue uno de los más discutidos en las negociaciones del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por su sigla en inglés), con una fuerte presión de Estados Unidos porque fuera de 12 años y una resistencia en distinto grado por los restantes 11 países integrantes de ese tratado comercial, del cual Estados Unidos se salió después, antes de entrar en vigor.
En Canadá se exigen ocho años de protección de datos para productos biológicos.
Otros asuntos
Según la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR, por su sigla en inglés), México y Estados Unidos acordaron además proporcionar una sólida protección de patentes para los innovadores mediante la consagración de las normas de patentabilidad y las mejores prácticas de la oficina de patentes para garantizar que los innovadores de Estados Unidos, incluidas las pequeñas y medianas empresas, puedan proteger sus inventos con patentes.
Extendieron asimismo el término mínimo de derechos de autor a 75 años para obras como interpretaciones de canciones y acordaron que obras como música digital, películas y libros se puedan proteger con las tecnologías actuales, como las medidas tecnológicas de protección y la información de gestión de derechos.
Establecieron un sistema de notificación y captura de puertos seguros de derechos de autor para proveedores de servicios de Internet (ISP) que brinde protección para IP y previsibilidad para empresas tecnológicas legítimas que no se benefician directamente de la infracción, de conformidad con las leyes de los Estados Unidos.
Canadá mantiene un sistema de «aviso y notificación» que no requiere que los ISP eliminen el contenido potencialmente infractor después de ser notificado.