Orla Mining anunció que ha vertido oro en su mina Camino Rojo, ubicada en el estado de Zacatecas, México.
En resumen, el Proyecto Camino Rojo es un yacimiento de oro, plata, plomo y zinc ubicado en el Municipio de Mazapil, cerca del pueblo de San Tiburcio.
Para ubicación geográfica: el proyecto se ubica 190 km al noreste de la ciudad de Zacatecas, 48 km al sur-suroeste de la ciudad de Concepción del Oro, Zacatecas, y 54 km al sur-sureste de la mina Peñasquito de Newmont.
El 11 de enero de 2021, la compañía anunció los resultados de un Estudio de Factibilidad actualizado y una estimación de reservas minerales en el Proyecto Camino Rojo.
A resultas de ello, se destacó un aumento de 54% en las reservas de mineral de oro contenidas y una extensión de 3.5 años a la vida útil de la mina del Proyecto Camino Rojo, que actualmente se encuentra en construcción.
El valor actual neto estimado después de impuestos (tasa de descuento de 5%) del Proyecto Camino Rojo es ahora de 452 millones de dólares con una tasa interna de rendimiento después de impuestos de 62% a un precio del oro de 1,600 por onza.
En la mina Camino Rojo se vertieron tres barras con un peso total de 1,278 onzas que contenían aproximadamente 770 onzas de oro y 510 onzas de plata.
Mina Camino Rojo
La compañía planea vertidos adicionales durante el resto de 2021.
Tanto Monterrey como Zacatecas tienen aeropuertos con vuelos regulares al sur a la Ciudad de México o al norte a los Estados Unidos. Hay numerosos caminos de grava dentro de la propiedad que unen el campo circundante con las dos carreteras, las carreteras 54 y 62, que atraviesan la propiedad.
Además, hay una vía férrea aproximadamente a 40 km al este de San Tiburcio. También hay muy pocas ubicaciones dentro de la propiedad que no sean fácilmente accesibles para vehículos con tracción en las cuatro ruedas.
La propiedad Camino Rojo constaba de siete concesiones en poder de Minera Camino Rojo, una subsidiaria de Orla, que cubre en total 163,129 ha, con una concesión que vence en 2057 y las siete restantes vencen en 2058.
Como parte de los requisitos para mantener las concesiones al día, tarifas semestrales debe pagarse sobre la base de una tarifa creciente por hectárea, los gastos de trabajo deben incurrirse en montos determinados en función del tamaño y la antigüedad de la concesión, y deben respetarse las regulaciones ambientales aplicables.