México ofrece oportunidades en electromovilidad en varios nichos tanto por las nuevas tecnologías como por los menores volúmenes de producción requeridos en la industria de autopartes.
Por lo general, cuando una empresa busca entrar a mercados ya consolidados es más difícil, pero ahora la tecnología está facilitando esto en el campo de la electromovilidad, destacó Francisco González, presidente de la Industria Nacional de Autopartes (INA).
En México, la administración de la presidente Claudia Sheinbaum planea lanzar el Programa de Desarrollo Tecnológico para la Innovación, en el que se incluye la producción de Olinia, un pequeño auto eléctrico.
“Hay posibilidades y nichos donde puedes empezar a producir de una manera de cero y entonces no tienes que competir con alguien más”, dijo González, al participar la semana pasada en el XXX Congreso del Comercio Exterior Mexicano, organizado por el Consejo Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce), en la ciudad de Aguascalientes.
Oportunidades en electromovilidad
En cuanto al aspecto de las cantidades, González refirió que anteriormente había tres grandes empresas ensambladoras de automóviles en Estados Unidos y otras 15 a nivel mundial. Pero hoy en día hay entre 50 y 60 en electromovilidad con volúmenes de producción más cortos.
Por ejemplo, si antes se producían 250,000 pick ups al año en una planta, en fábricas de electromovilidad pueden llegarse a producir 20,000 unidades anualmente.
“Esto permite que nuevas tecnologías, como la impresión 3D, pueda ser una posibilidad para vender autopartes”, dijo González.
A escala mundial, el futuro de la electromovilidad es básicamente el futuro de la electrónica de consumo, la conducción conectada.
Por consiguiente, en particular, hay oportunidades en electromovilidad en la parte de desarrollo de software.
Un ejemplo puesto por González: las líneas de código que requieren navegadores como Google Chrome o Safari es de aproximadamente 1.5 millones, mientras que el número correspondiente para un avión grande como el Dreamliner 787 es de cerca de 14 millones de líneas y, en su momento, el de un vehículo de conducción autónoma será de 150 millones de líneas.
La electromovilidad brinda a países y regiones muchas oportunidades. Por un lado, les permite superar los patrones de transporte que dependen del carbono. Además, apoya la eficiencia económica. También ayuda a evitar o reducir impactos negativos, como la contaminación del aire y la congestión del tráfico.