La empresa Orbia indicó que México incrementó 24% en forma interanual su demanda de sosa cáustica en 2021, a 418,000 toneladas.
Para conocer el producto: la sosa cáustica, que tiene el nombre comercial de hidróxido de sodio (NaOH), se utiliza ampliamente en las industrias de la alúmina, jabones, detergentes y químicos en general.
Orbia cuenta con plantas para el proceso Sal-Cloro-Sosa en México donde se producen cloro, sosa cáustica, sal, ácido clorhídrico e hipoclorito de sodio.
Al mismo tiempo, produce en Colombia hipoclorito de sodio y en Alemania, cloro, sosa cáustica y VCM, principalmente.
Además, la empresa cuenta con plantas que producen fosfatos industriales y alimenticios.
Por otra parte, en una inversión conjunta 50/50 con Oxychem, Orbia produce etileno en un cracker localizado en Ingleside, Texas, Estados Unidos.
Por añadidura, la sosa cáustica tiene múltiples aplicaciones, incluyendo la producción de aceites, jabones y detergentes, regeneración de resinas de intercambio iónico para tratamiento de agua, lavado de botellas de vidrio, blanqueo de celulosa en la industria de pulpa y papel, producción de azúcar refinada, teñido de telas de algodón, producción de agroquímicos, fabricación de grenetinas y gelatinas, productos de limpieza en general.
Orbia
En México, este producto tiene muchos usos industriales, incluidos productos químicos orgánicos (23%) de inorgánicos (24%), así como en la producción de jabones y detergentes (23 por ciento).
La capacidad total de producción de sosa cáustica en México en 2021 fue de 594,000 toneladas, y de cloro 551,000 toneladas, mientras que la producción de sosa cáustica y cloro de Orbia, en el mismo año en México, fue de 1 millón 206,000 y 184,000 toneladas, respectivamente.
En 2021, la demanda de cloro en México fue de 214,000 toneladas, según IHS Markit.
En los últimos 20 años ha habido un cambio significativo en el uso de tecnologías para producir cloro-álcali.
La tecnología de celdas de membrana intensificó su uso a mediados de la década de 1980, lo que reemplazó a la tecnología de celdas de mercurio porque la tecnología de membrana trae inherentemente mejoras ambientales y reduce los costos de energía.
En Europa Occidental, la producción de cloro-sosa basada en tecnología de mercurio se convirtió a tecnología de celdas de membrana en 2018.
Algunas plantas de cloro-sosa con celdas de diafragma a base de amianto están modificando este material con otro polímero libre de amianto y su operación aún está aprobada y regulada por sus respectivos gobiernos. Orbia no utiliza tecnología de mercurio en sus procesos de cloro.