Peñoles programa poner en operación su mina polimetálica Capela, ubicada en Guerrero, México, en el tercer trimestre de 2019, con una inversión de 202 millones de dólares.
De modo general, esta unidad minera contará con una capacidad de molienda y beneficio de 4,500 toneladas diarias de mineral para producir plata, oro, zinc, plomo y cobre en concentrados.
Hasta ahora, el desarrollo del proyecto ha progresado de manera significativa, sobre todo en las instalaciones de superficie.
Las actividades relativas a la construcción de la futura planta de beneficio incluyeron la colocación de las estructuras metálicas que albergarán las diferentes áreas del proceso.
En el área de trituración se realizó el montaje de la banda transportadora de mineral al apilamiento de gruesos, y en molienda se montaron las coronas de los molinos SAG y de bolas, así como las plataformas de operación de estos equipos.
En cuanto a flotación, se comisionó la grúa viajera y avanzó el montaje de los soportes de las celdas, mientras que en filtración se realizó el montaje de la estructura principal.
Asimismo, inició la construcción de pisos y muros perimetrales para los tanques espesadores de zinc, plomo y cobre, se construyó la planta eléctrica y se avanzó en la edificación del cuadro de maniobras.
Peñoles, su interés por el proyecto
Al cierre del 2018, el avance general en la construcción de este proyecto fue de 83.5% y la inversión sumaba 247 millones de dólares.
La futura unidad minera contará con una capacidad de molienda y procesamiento para producir un promedio anual de 4.7 millones de onzas de plata, 40,000 toneladas de zinc, 8,600 toneladas de plomo y 7,000 de cobre, contenidos en concentrados de plomo, zinc y cobre.
Antecedentes de la mina
En octubre del 2000, mediante una asociación con Dowa Mining y Sumitomo Corporation, inició operaciones la mina Rey de Plata (actualmente Capela), ubicada en Teloloapan, Guerrero, con una capacidad de molienda de 360,000 toneladas anuales.
Entonces Industrias Peñoles poseía 51% de la participación. Sin embargo, a finales de 2001, la compañía tomó la decisión de suspender la operación de la mina debido a que la importante caída en el precio del zinc no permitía garantizar a los accionistas un rendimiento adecuado sobre la inversión.
Luego Peñoles adquirió, en diciembre de 2004, el total de acciones de sus socios minoritarios, y en 2008 se retomaron los trabajos de barrenación.
En 2011 se realizó una estimación inicial de recursos minerales por 18.8 millones de toneladas conteniendo 15% de zinc equivalente y en 2012 fue aprobada la construcción de la nueva unidad minera por el Consejo de Administración de la compañía, que se encuentra en proceso y contará con una inversión de 303 millones de dólares.