El peso cerró la semana con una apreciación de 2.71% o 53.2 centavos, cotizando alrededor de 19.07 pesos por dólar, habiendo tocado un nuevo mínimo en el año de 19.0508 pesos por dólar. La apreciación del peso durante la semana ocurrió a la par de todos los principales cruces frente al dólar y de las divisas de economías emergentes y se debió principalmente a los siguientes dos factores:
- La Reserva Federal mantendrá una postura acomodaticia y será cautelosa en su transición hacia una política monetaria neutral. A pesar de que subió su tasa de referencia por tercera ocasión desde la crisis financiera en 25 puntos base a un rango entre 0.75% y 1.0%, esto fue interpretado como consecuencia de un buen desempeño de la economía estadounidense. No obstante, el FOMC dejó en claro que no serán más agresivos con los incrementos a la tasa objetivo al mantener sin cambios sus expectativas de inflación, crecimiento y desempleo, así como la proyección de incrementos a la tasa objetivo, en donde se contemplan sólo dos aumentos adicionales este año.
Cabe agregar que el incremento a la tasa de referencia de la Fed también hace más probable que Banxico suba su tasa en al menos 25 puntos base el 30 de marzo, permitiendo una mayor apreciación del peso.
- La retórica estadounidense con respecto a México continúa suavizándose. Este jueves, líder del Consejo Nacional de Comercio de la Casa Blanca, Peter Navarro, comentó que Estados Unidos quiere que México y Canadá se unan para formar una potencia manufacturera a través de un endurecimiento de las reglas de origen. Cabe señalar que las reglas de origen indican el porcentaje del producto que debe ser manufacturado en el país de origen para acceder a los beneficios del TLCAN, por lo que reglas más restrictivas estarían forzando una mayor integración regional.
- Debido a que el diferencial de tasas entre México y Estados Unidos se fue incrementando durante 2016, a lo que se suma un menor riesgo de fugas de capitales frente a la nueva administración estadounidense, las posiciones especulativas en el mercado de futuros han seguido favoreciendo al peso. En la semana que corresponde a los días 8 al 14 de marzo, las posiciones especulativas netas a la espera de una depreciación del peso se redujeron en 37,291 contratos, cada uno de 500,000 pesos. Con esto, el número de contratos netos a la espera de una depreciación del peso se ha reducido en 67,854 contratos desde que Donald Trump asumió la presidencia de Estados Unidos.
Otro factor que también pudo contribuir con la apreciación del peso fue una menor aversión al riesgo a nivel global. Esta semana se llevaron a cabo las elecciones parlamentarias de Holanda, en donde el Partido de la Libertad que es de extrema derecha quedó lejos de conformar el Gobierno al obtener 20 de 150 asientos. El rechazo de Holanda a la extrema derecha es un prospecto positivo para las próximas elecciones en Francia, cuya primera vuelta será en abril.
Hacia adelante, el tipo de cambio enfrenta un nuevo soporte clave, el promedio móvil de 55 semanas que se ubica en 19.14 pesos por dólar. El nivel fue rebasado esta semana por primera ocasión desde septiembre de 2014 pero respetado. En consecuencia, a pesar de que el mercado sigue optimista, se espera que el tipo de cambio cotice todavía por arriba de 19.00 pesos por dólar durante la segunda mitad del mes.
En la semana, el peso alcanzó un mínimo en el año de 19.0508 y un máximo de 19.7213 pesos por dólar, el euro alcanzó un mínimo de 1.0600 y un máximo de 1.0782 dólares por euro. Mientras tanto, el euro-peso alcanzó un mínimo de 20.4513 y un máximo de 21.7617 pesos por euro en las cotizaciones interbancarias a la venta.
A las 2:54 p.m. las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 19.0773 pesos por dólar, 1.2391 dólares por libra y en 1.0737 dólares por euro.
Gabriela Siller; PhD
Director de Análisis Económico-Financiero.
Banco BASE