El peso cerró la semana con una depreciación de 1.48% o 27.5 centavos, cotizando alrededor de 18.83 pesos por dólar y tocando un máximo de 18.9795 pesos por dólar, siendo ésta la mayor depreciación semanal en dos meses. Cabe destacar que el peso se ubicó entre las divisas más depreciadas de la semana en la canasta de principales cruces del dólar, sólo por detrás del rand sudafricano que perdió 3.02% y el dólar canadiense, que mostró una caída semanal de 2.01%. Durante los últimos cinco días, la depreciación del peso se debió a los siguientes factores:

1. Se ha fortalecido la expectativa de mayores tasas de interés en Estados Unidos. El Presidente de la Fed, Jerome Powell, se presentó ante comités del Senado y de la Cámara de Representantes, ante los que señaló que existen expectativas favorables para la actividad económica estadounidense. Asimismo, reiteró que la Fed buscará un balance en la implementación de su política monetaria, para evitar un sobrecalentamiento de la actividad económica y al mismo tiempo, lograr que la inflación se ubique en el objetivo de 2% en el largo plazo. Al día de hoy, la probabilidad implícita de que la Fed suba su tasa de interés el 21 de marzo se ubica en 93.4 por ciento.
2. Los participantes del mercado cambiario reaccionaron con aversión al riesgo tras la decisión de la administración de Donald Trump de imponer aranceles a las importaciones de aluminio y acero en un 10% y 25% respectivamente, medida cuyos detalles se darán a conocer hasta la siguiente semana. El Director General de la Organización Mundial de Comercio, advirtió que el anuncio de Estados Unidos tiene el potencial de una escalada, agregando que una guerra comercial no está en el interés de nadie. En las horas posteriores a la decisión arancelaria de Estados Unidos, varios países y líderes industriales criticaron la medida. Asimismo, destacó que el Presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, dijo que los países del bloque están preparados para responder con impuestos a una variedad de productos estadounidenses que no están relacionados con los metales industriales.

El riesgo de que en el futuro cercano se observe una guerra comercial entre las principales economías del mundo, ocasionó que el yen japonés cerrara como la divisa más apreciada en la semana, avanzando 1.10% hasta 105.71 yenes por dólar.

3. Es poco probable que se observen avances significativos en la séptima ronda de renegociación del TLCAN, sobre todo ahora que Estados Unidos anunció la implementación de medidas arancelarias contra las importaciones de acero y aluminio. Desde el comienzo de la semana, el panorama para la séptima ronda se volvió sombrío con la noticia de que el negociador en jefe de Estados Unidos sobre el tema de reglas de origen, Jason Bernstein, se retiró de las mesas de negociación, evento que también generó presiones al alza para el tipo de cambio.

Al comienzo de la siguiente semana se espera que los riesgos para el tipo de cambio sigan sesgados al alza, pues el lunes 5 se espera que concluya la séptima ronda de renegociación del TLCAN en donde se anticipan pocos avances. En caso de que el tipo de cambio perfore y se mantenga estable por arriba de la resistencia de 18.94 pesos por dólar, es altamente probable que se ubique por arriba de 19 pesos por dólar durante la siguiente semana.

Durante la semana, la paridad peso-dólar alcanzó un mínimo de 18.5458 y un máximo de 18.9795 pesos por dólar, el euro-peso alcanzó un mínimo de 22.7505 y un máximo de 23.3671 pesos por euro en las cotizaciones interbancarias a la venta. Por su parte, el euro tocó un mínimo de 1.2155 y un máximo de 1.2355 dólares por euro.

Al cierre, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 18.8305 pesos por dólar, 1.3793 dólares por libra y en 1.2328 dólares por euro.

Gabriela Siller; PhD

Director de Análisis Económico-Financiero.

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