Los precios de los productos básicos han disminuido con respecto a los niveles máximos alcanzados en 2022, pero siguen siendo altos en comparación con períodos anteriores.
En septiembre de 2023 el precio medio del petróleo crudo había aumentado 50% con respecto a 2019, mientras que los precios europeos del gas natural habían crecido 140%, según un informe de la OMC.
Hacia adelante, la OMC advierte que las fuertes subidas de los precios de la energía durante el invierno en el hemisferio norte podrían volver a socavar el crecimiento del comercio y la producción como lo hicieron en 2022.
Por lo pronto, la caída de los precios de los productos básicos contribuyó a reducir la inflación global en muchas economías, pero la inflación subyacente (que no incluye los precios inestables de los alimentos y la energía) se ha mantenido.
En septiembre, la inflación global se situó en 3.7% en los Estados Unidos y 4.3% en la zona del euro. Muy por encima de los objetivos de los bancos centrales.
Por su parte, China se encontraba casi en una situación de deflación.
Productos básicos
Desde marzo de 2020, y a lo largo de los últimos dos años, los mercados mundiales y los precios de las materias primas han sido extremadamente volátiles debido a los impactos de la pandemia de Covid-19, con mayores impactos en la volatilidad causados por la guerra en Ucrania que comenzó en febrero de 2022.
La empresa CoJax Oil and Gas Corporation indicó que los precios de las materias primas se mantuvieron estables durante el cuarto trimestre de 2022, ya que la demanda siguió superando la oferta relativa.
Si bien las preocupaciones recesivas han ejercido cierta presión a la baja sobre los precios de las materias primas, lo que ha provocado que los precios del petróleo y el gas bajen en el primer trimestre de 2023 desde sus máximos anteriores en 2022, la demanda mundial de materias primas sigue superando los niveles anteriores a la pandemia.
Aunque la oferta ha aumentado y se ha visto una recuperación continua de los precios de las materias primas desde el comienzo de la pandemia, todavía existe un elemento de volatilidad e incertidumbre que CoJax Oil and Gas Corporation espera que continúe al menos a corto plazo y posiblemente a más largo plazo, en parte por el impacto del conflicto militar ruso-ucraniano en los mercados financieros y de productos básicos mundiales, y el efecto asociado de las sanciones comerciales sobre las importaciones de petróleo y gas natural de Rusia.
Esta volatilidad podría impactar negativamente los precios futuros del petróleo, el gas natural, los productos petrolíferos y los productos industriales.