Los programas OEA para mipymes ayudan a lograr que el comercio mundial sea más inclusivo y resiliente.
Según la OMC, un programa OEA (Operador Económico Autorizado) reconoce a empresas que cumplen normas de seguridad y cumplimiento aduanero, otorgándoles beneficios en el comercio internacional.
Aunque la OMC no los gestiona directamente, los considera buenas prácticas dentro del Acuerdo sobre Facilitación del Comercio (AFC). Estos programas son aplicados por autoridades aduaneras nacionales y siguen los lineamientos del Marco SAFE de la Organización Mundial de Aduanas.
Programas OEA para mipymes
Aunque las mipymes son fundamentales para la economía global, su presencia en asociaciones entre aduanas y empresas sigue siendo limitada. No existe un modelo único de programas OEA que aborde sus desafíos específicos.
Por eso, se sugiere que las aduanas adopten enfoques más inclusivos, aumenten la divulgación y brinden apoyo adaptado a sus limitaciones.
Un programa OEA identifica a las empresas que cumplen con altos estándares de confianza. Estas pueden ser exportadores, importadores, transportistas o agentes aduanales. A cambio, reciben importantes beneficios.
Por ejemplo, enfrentan menos inspecciones físicas o documentales. Además, obtienen un despacho más ágil de sus mercancías. Y se benefician del reconocimiento mutuo en otros países.
Fortalecer la participación de las mipymes en los programas OEA puede impulsar el crecimiento económico y mejorar la seguridad de las cadenas de suministro.
Aunque el AFC no se enfoca directamente en mipymes, muchos países han solicitado asistencia técnica para implementar el artículo 7.7 sobre operadores autorizados.
Las aduanas deben mejorar la comunicación y contar con estrategias claras que integren a las mipymes, ya que la falta de promoción sigue siendo una barrera importante para su participación.
Facilitación del comercio
El AFC compromete a los países a reducir la burocracia en la frontera para un movimiento más rápido de mercancías sin comprometer la seguridad ni los estándares de calidad.
Si bien 79.4% del acuerdo se había implementado hasta abril de 2024, algunas de las disposiciones más importantes para desarrollar la resiliencia de la cadena de suministro, como la cooperación entre agencias fronterizas, las ventanillas únicas, la gestión de riesgos y los procedimientos de prueba, seguían estancadas en niveles más bajos de implementación (68.0%, 56.7%, 67.9% y 66.3%, respectivamente).