En el sector agrícola, uno de los términos más usados últimamente ha sido el de “digitalización de la producción agrícola”. No es de extrañar, pues en los últimos años la implementación y el uso de tecnología y servicios digitales ha incrementado de forma notoria, con el fin de recopilar datos sobre la producción y analizarlos para tomar mejores decisiones.
Tecnologías de la agricultura de precisión, como el GPS o la cartografía de los campos ya se utilizan ampliamente en las explotaciones agrícolas de medio mundo. Gracias a ellas, las técnicas propias de estas formas modernas de agricultura, como la aplicación de tasa variable de insumos como el agua o fertilizantes, pueden realizarse con éxito. Otro de los puntos clave en la mejora de la agricultura ha sido el proporcionar software agrícola en México. Ambas cosas combinadas han supuesto una reducción del riesgo, un mayor ahorro, un aumento del rendimiento y productos de más calidad.
Perspectiva general de la agricultura en México
La agricultura forma parte de la zona desde hace miles de años y a día de hoy sigue contribuyendo económica y culturalmente al país. Más de la mitad de la superficie total está siendo usada por el sector agrícola y la producción de cultivos da empleo al 13% del total de la población mexicana.
Debido a su enorme extensión y variedad de climas y ecosistemas, los productores agrícolas mexicanos tienen la posibilidad de producir más de 200 tipos de cultivos, convirtiendo a México en el productor de alimentos más importante de Latinoamérica y uno de los más importantes del mundo.
Esta impresionante producción supone el 4% del PIB del país. Además, el valor de dichos productos a la hora de exportarlos alcanzó los 26.000 millones de dólares, siendo el tercer país latinoamericano más exportador, solo por detrás de Brasil y Argentina. Aunque la mayoría de las exportaciones se produce a Estados Unidos, otros mercados, como Canadá, Japón, Hong Kong y Europa cada vez reciben más productos cultivados en México. El desarrollo de mejores prácticas agrícolas a gran escala está detrás de esta evolución, aunque las granjas comunitarias y familiares siguen siendo una parte vital del sector en muchas zonas del país.
Principales cultivos de México
Entre los cultivos más plantados en el país se encuentran el maíz, el tomate, el trigo, el café o la caña de azúcar. En el caso del primero de ellos, se trata de un cultivo originario del país y ocupa casi un tercio del total de las tierras agrícolas. Otros cultivos tropicales importantes en la producción agrícola mexicana son el aguacate, el plátano, la piña, el mango, el cacao o la vainilla.
Sin embargo, esta variedad de cultivos y la amplia extensión de las tierras agrícolas trae consigo un problema asociado. Más del 75% del agua dulce se utiliza con fines agrícolas y un gran número de acuíferos y masas de agua dulce están sobreexplotadas. Si este problema no se corrige, en el futuro habrá problemas de abastecimiento. Además, las aguas residuales generadas por la agricultura a menudo contienen grandes cantidades de pesticidas y fertilizantes, que pueden plantear graves problemas de salud en la población.
Uso de tecnologías basadas en la teledetección en la agricultura
Uno de los mayores retos a los que se enfrenta Latinoamérica son los cambios en los patrones meteorológicos provocados por el cambio climático, tales como temperaturas inusualmente altas, sequías o ciclones tropicales. Además de las difíciles condiciones meteorológicas, muchos agricultores locales carecen de maquinaria moderna y de herramientas digitales debido a las pobres infraestructuras de muchas zonas rurales. Tampoco hay suficientes especialistas agrícolas cualificados para ayudar a los agricultores con menos recursos a mantener el rendimiento de los cultivos de forma efectiva y sostenible.
De ahí que el uso de software de gestión agrícola basado en teledetección sea tan útil. Permiten planificar, servir como apoyo a las operaciones de campo, monitorizar y evaluar los procesos agrícolas de una manera eficiente. Entre las características más habituales de este tipo de programas están los índices de vegetación, una de las mejores maneras de poder conocer el estado real del campo a distancia. Por ejemplo, el índice NDVI mide el verdor y la densidad de la vegetación, ya que es sensible a la clorofila, que suele ser un indicador fiable de la salud de la planta. Otras funciones habituales son una previsión meteorológica local fiable para los próximos días, datos históricos sobre el clima o mapas de prescripción de insumos.
La agricultura en México juega un papel muy importante a nivel social y económico. Pese a sus números, el sector tiene mucho margen de mejora, debido a la todavía escasa adopción de prácticas agrícolas modernas. El uso de software agrícola es un buen punto de partida para descubrir su potencial y ser capaces de producir cosechas más abundantes con un menor gasto.