Las reglas de origen del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y otros TLC’s ayudan a garantizar que los beneficios de estos acuerdos comerciales se otorguen únicamente a los bienes producidos por las partes signatarias de los TLC´s y no a los bienes fabricados total o parcialmente en otros países.
Si una importación en Estados Unidos no cumple con los requisitos de las normas de origen del TLCAN, ingresará a esa nación bajo otro programa de importación.
En 2017, el 53% de las importaciones estadounidenses de Canadá y México ingresaron libres de impuestos bajo el TLCAN, mientras que 47% ingresó bajo otros programas de importación de Estados Unidos.
En el caso del TLCAN, la mayoría de los bienes que contienen materiales de países que no son miembros del TLC también pueden considerarse norteamericanos si los materiales se transformaron suficientemente en la región del TLCAN para pasar por un cambio en la clasificación arancelaria (llamado «cambio de tarifa»).
En muchos casos, los bienes deben tener un nivel mínimo de contenido de América del Norte, además de sufrir un cambio de tarifa.
El contenido de valor regional se puede calcular utilizando el método de «valor de transacción» o «costo neto».
El método de valor de transacción, que es más simple, se basa en el precio del bien, mientras que el método del costo neto se basa en el costo total del bien menos los costos de regalías, promoción de ventas y embalaje y envío. Los productores generalmente tienen la opción de elegir qué método utilizan, con algunas excepciones, como la industria de vehículos de motor, que debe usar el método del costo neto.
Las negociaciones del TLCAN se iniciaron en 1992 bajo la presidencia de George Herbert Walker Bush y continuaron bajo la presidencia de Bill Clinton. El presidente Clinton firmó el acuerdo el 8 de diciembre de 1993 y el TLCAN entró en vigor el 1 de enero de 1994.
Es particularmente significativo porque fue el acuerdo de libre comercio (TLC) más completo negociado en ese momento, contenía varias disposiciones innovadoras y fue la primera de una nueva generación de TLC de Estados Unidos negociada posteriormente.
