Del total de la recaudación fiscal en el primer semestre del año en curso, el 84.6% fue resultado del cumplimiento voluntario de las obligaciones fiscales de los contribuyentes, a lo que se le conoce como recaudación primaria.
En tanto, el restante 15.4%, al que se le denominará recaudación fiscal secundaria, fue producto de la intervención de la autoridad, a través de promover la regularización de los contribuyentes que no cumplieron con sus declaraciones y pagos de manera oportuna, así como de actos de fiscalización y de cobranza coactiva.
La recaudación tributaria es una fuente primordial en el financiamiento de un gobierno. Un sistema tributario eficiente y progresivo permite al Estado la provisión de servicios públicos y de infraestructura que permitan elevar el nivel de bienestar de la población.
Para ello, de acuerdo con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), se deben erradicar las prácticas en la recaudación fiscal a través de las cuales algunos contribuyentes evitan o disminuyen su pago de impuestos, a fin de que cada contribuyente pague los impuestos que le correspondan.
Recaudación fiscal
Según el SAT enfocará sus esfuerzos, principalmente, en tres líneas de acción para lograr sus objetivos, el “ABC” del SAT:
Aumentar la eficiencia recaudatoria
– Realizar la recaudación fiscal de manera más eficiente en el marco de la legislación actual.
– Facilitar la relación de los contribuyentes con la administración tributaria.
– Incentivar el cumplimiento voluntario de las obligaciones fiscales y aduaneras de los contribuyentes, a través de herramientas digitales y de la facilitación de trámites.
– Mejorar la comunicación de manera remota con el contribuyente para que sea clara, oportuna y cercana.
Recaudación primaria y secundaria, enero–junio 2020
Bajar la evasión y elusión fiscal
– Combatir la elusión y evasión fiscal mediante estrategias integrales a lo largo del ciclo tributario que permitan la detección oportuna y el combate de estas prácticas indebidas.
– Implementar la utilización de herramientas tecnológicas que permitan un mejor control en sectores susceptibles de prácticas ilegales.
– Fortalecer la fiscalización y el control aduanero por medio de modelos de riesgo más asertivos y de inteligencia analítica basada en ciencia de datos.
Combatir la corrupción
– Integrar el combate a la corrupción con el objetivo de cero impunidad.
– Coordinar esfuerzos con otras dependencias de Seguridad Nacional con el fin de implementar acciones de inteligencia y operativos destinados a la mejora de procesos y a la generación de tácticas anticorrupción.
– Robustecer los mecanismos de transparencia y participación ciudadana a fin de que los contribuyentes tengan la certeza de que sus contribuciones se están utilizando para los fines que establece la ley.