Sudáfrica es el mayor productor mundial de manganeso, seguida de Gabón, Australia y China.
Por lo general, el manganeso se extrae de minas a cielo abierto utilizando técnicas tradicionales de minería y procesamiento.
La principal fuente de demanda competidora es la producción de acero, donde el manganeso se utiliza como aleación y para desoxidar el acero.
De acuerdo con estimaciones del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), Sudáfrica produjo 7.2 millones de toneladas de manganeso en 2022, por delante de Gabón (4.6 millones toneladas), Australia (3.3 millones toneladas) y China (990,000 toneladas)
El USGS refirió que la producción mundial de acero, principal uso de manganeso, disminuyó en 2022 en comparación con la producción de 2021 debido a las interrupciones de la cadena de suministro resultantes del conflicto entre Rusia y Ucrania y los cierres intermitentes relacionados con la pandemia de la enfermedad por coronavirus de 2019 (Covid-19) en China.
American Battery Technology Company destaca que las baterías de iones de litio se han convertido en la batería recargable preferida en teléfonos móviles, ordenadores, vehículos eléctricos y sistemas de almacenamiento eléctrico estacionario a gran escala.
Según esta empresa, la capacidad de producción mundial de baterías de iones de litio era de aproximadamente 1,570 gigavatios hora por año (GWh/año) a finales de 2022 y se prevé que crezca a aproximadamente 6,700 GWh/año para 2031, impulsada principalmente por la demanda de vehículos eléctricos.
Manganeso
Existen importantes vientos de cola regulatorios y sociales que impulsan el crecimiento de la demanda de vehículos eléctricos y sistemas de almacenamiento de energía de gran formato.
Esto, a su vez, está impulsando una demanda significativa de materiales para baterías como litio, cobalto, níquel y manganeso.
Las baterías de iones de litio están diseñadas en una variedad de factores de forma y químicas.
Los factores de forma actuales a nivel de celda utilizados son principalmente geometrías cilíndricas, prismáticas y de bolsa.
Por un lado, las químicas de cátodos de batería más comunes que han surgido son el óxido de níquel, cobalto y aluminio litiado, el óxido de níquel, manganeso y cobalto litiado, el óxido de cobalto litiado y el fosfato de hierro litiado.
Por otra parte, las químicas de los ánodos de baterías más comunes consisten en grafito, silicio y litio metálico.
Se espera que estas químicas evolucionen en función del desarrollo de nuevas tecnologías y la disponibilidad, el costo y la huella ambiental del ciclo de vida de los minerales requeridos.