Los gobiernos de Suiza, Japón y Hong Kong suspendieron las importaciones de carne de Brasil, luego de que la Policía Federal brasileña reveló la semana pasada los resultados de la Operación «Carne Débil» (Carne Fraca, en portugués) y confirmó la adulteración y «maquillaje» de carne bovina y aviar en mal estado por parte de varias empresas.
China, la Unión Europea, México y Chile han tomado acciones similares, con restricciones en forma parcial o total. Corea del Sur, quien también se había sumado a esta lista, revirtió la medida y volvió a abrir su mercado.
La Policía Federal brasileña puso en marcha el viernes una operación para desmantelar una trama de corrupción que involucraba a procesadoras de carne e inspectores agropecuarios del Ministerio de Agricultura y que autorizaba la comercialización de productos que no cumplían las normas de calidad o que, incluso, estaban caducados o podridos.
En algunos casos, los productos cárnicos se diluyeron con rellenos como harina o agua, según los informes de los medios. En otros casos, se acusa que plantas de carne fueron capaces de seleccionar a los inspectores que las visitarían.
La investigación involucra a 29 compañías, incluidas las multinacionales brasileñas JBS y BRFoods, quienes han negado las irregularidades.
Brasil exportó 6,900 millones de dólares en carne de ave y 5,500 millones de dólares de carne de vacuno a todo el mundo.
En un editorial de este miércoles, el periódico Folha de São Paulo expuso que la Policía Federal inspeccionó a un solo establecimiento, al tiempo que las sospechas restantes fueron derivadas de escuchas telefónicas, sobre todo en lo que sucede colusión entre el Ministerio de Agricultura y representantes de las empresas fiscales para eludir los requisitos legales para la calidad de la carne.
El diario dijo que sólo seis de las 21 unidades venden el producto en el exterior, con exportaciones por 120 millones de dólares en 2016. Sin embargo, agregó, el ruido de la Policía Federal ha manchado la reputación del producto brasileño en su conjunto.
En otro editorial, el diario Valor Económico destacó que los frigoríficos exportadores se someten a visitas bimensuales, pero no hay ni siquiera programa de inspección de varios otros que sirven al mercado interno.
Valor Económico resaltó que para adjudicar los puestos técnicos con cargos políticos, el sistema de inspección se vuelve frágil y manipulable por los intereses fiscales que buscan su propio beneficio. “La acción de saneamiento de la Policía Federal es importante, con menos fanfarria y más evidencia”, añadió.