Empresas mexicanas como Alfa, Cinépolis y Bachoco han manifestado directa o indirectamente los riesgos para las inversiones y el comercio que realizan con Estados Unidos si el candidato republicano Donald Trump llega a la Presidencia de ese país.
“Una desaceleración de la economía en EE.UU., la terminación del TLC, o la imposición de aranceles o tarifas a las exportaciones de México a EE.UU., podrían tener un impacto negativo en la economía mexicana”, dijo Alfa en su reporte anual.
Alfa concentra varias filiales, entre ellas Alpek, el líder productor de poliéster en Estados Unidos; Sigma Alimentos, el más grande productor de hot dogs de América del Norte, y Nemak, el mayor productor de componentes de alta tecnología de motores de aluminio para la industria automotriz en el mundo.
“Lo anterior podría tener un impacto negativo importante en las operaciones y resultados de Alfa, lo que afectaría el precio de sus acciones”, agregó este conglomerado.
Alejandro Ramírez, presidente de Cinépolis, la exhibidora cinematográfica más grande de América Latina, declaró que le preocupa que Trump llegue a la Casa Blanca.
“Es evidente que si revoca el tratado, hay la posibilidad de que se inicie una guerra comercial entre los dos países y, por lo menos, volvamos a los aranceles previos al tratado”, dijo Ramírez este martes, en una conferencia organizada por la Asociación de Empresarios Mexicanos, en Washington D. C.
Las empresas mexicanas han enviado flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) por 43,000 millones de dólares a Estados Unidos en forma acumulada, según datos de la Secretaría de Economía.
Cinépolis, por ejemplo, ha invertido 140 millones de dólares desde que en 2011 comenzó a operar 150 salas de cine en California, Connecticut, Florida, Nueva York y Nueva Jersey, y planea abrir más salas en Ohio, Texas y Virginia durante 2017.
Cinepolis importa a México bienes estadounidenses por 40 millones de dólares cada año en alimentos y proyectores para sus salas de cine.
El TLCAN ha ayudado a industrializar el centro y norte de México, en gran parte con inversiones de Estados Unidos; ha fortalecido las cadenas de valor de América del Norte; ha impulsado a los productores mexicanos de frutas y verduras y a granjeros y agricultores de granos estadounidenses, entre otros efectos.
“Estados Unidos va a celebrar su elección presidencial, y dará a lugar a un cambio en la dirección nacional (…) Este cambio político y cualquier otro cambio político o regulatorio en los EE.UU. con respecto a México, pueden afectar a las condiciones económicas en México y, en consecuencia, afectarían nuestro desempeño financiero”, advirtió Bachoco, en su reporte anual.
Entre otras compañías mexicanas que han invertido en el mercado estadounidense están: Bimbo, Cemex, Industria CH, Gruma, Banorte, Bachoco, Kuo, Lala, Kaltex, Grupo Bal, Cinepolis, La Costeña, Mexichem, Grupo México, La Costeña, Metalsa, IUSA, Metalsa y Katcon.
La correlación directa entre la economía mexicana y la de Estados Unidos ha crecido en los últimos años como resultado de la firma del TLCAN y el consecuente incremento en la actividad comercial entre ambos países.
En las elecciones presidenciales de Estados Unidos, Trump ha declarado que si México no quiere renegociar el TLCAN, impulsaría la salida de su país de ese acuerdo e, incluso, de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
“Tenemos gran preocupación porque invertimos en este país (Estados Unidos), importamos muchas cosas de este país, empleamos 1,400 personas en este país y queremos seguir invirtiendo aquí”, dijo Ramírez.