El repunte de las materias primas que comenzó en 2021 y continuó durante la primera mitad de 2022 se atenuó en la segunda mitad de 2022 y en 2023.
La inflación, más alta de lo normal, fue uno de los principales impulsores de los buenos resultados de las materias primas, y esas cifras empezaron a enfriarse con respecto a los máximos alcanzados en años anteriores.
De acuerdo con Columbia Funds Series Trust II, la tendencia a la baja de la inflación, combinada con el tiempo adicional para resolver los problemas de la cadena de suministro que quedaban de los desafíos iniciales de la pandemia Covid-19, condujo a una disminución de los precios de los productos básicos en general.
Aunque la invasión rusa de Ucrania ha continuado, la preocupación por la distribución de productos agrícolas procedentes de Ucrania ha remitido.
La restricción de la actividad portuaria desde Ucrania tuvo lugar entre marzo y agosto de 2022, tras lo cual Ucrania, Rusia, Turquía y las Naciones Unidas firmaron la Iniciativa de Granos del Mar Negro.
Así, las rutas del Mar Negro se reabrieron, y las exportaciones de maíz y trigo desde Ucrania volvieron a los niveles medios estacionales.
Pero a mediados de julio, Rusia anunció que se retiraba del acuerdo para la exportación de granos a través del Mar Negro, el cual permitía mantener el flujo de alimentos desde Ucrania a más de 40 naciones.
Una cuestión que sigue siendo crucial para los futuros precios de las materias primas es la rapidez con la que China continuará su política de reapertura tras su bloqueo cero de Covid-19.
Materias primas
El bloqueo de China provocó un importante recorte de la demanda de metales y energía, ya que gran parte de los proyectos de desarrollo inmobiliario del país quedaron en suspenso y se paralizaron los viajes por toda China.
Una reapertura satisfactoria de China podría dar lugar a un repunte de la demanda en diversos sectores de materias primas, proporcionando un catalizador para equilibrar los efectos de la oferta y la demanda. Pero hasta ahora, esta reapertura no ha tenido una gran fuerza.
La mayoría de los subsectores de materias primas registraron rentabilidades negativas durante el año que finalizó el 31 de mayo de 2023, con la energía y los metales industriales a la zaga.
Dentro de la energía, el gas natural fue uno de los principales rezagados, debido principalmente a la reducción de la demanda necesaria para calentar los hogares como consecuencia de un invierno suave.
Los metales industriales se vieron afectados negativamente por el bloqueo de la producción en China, que provocó una paralización de la producción en el sector inmobiliario chino, lo que a su vez redujo la demanda de la mayoría de los metales industriales.
En general, la agricultura registró rentabilidades negativas, pero dentro del sector algunas materias primas como el azúcar, el cacao y el café obtuvieron resultados positivos durante el periodo.
Los metales preciosos registraron rentabilidades positivas durante el periodo, encabezadas por el fuerte rendimiento del oro, que representa un gran porcentaje de la exposición a metales preciosos del índice de referencia.
Por último, la ganadería fue otro subsector con resultados positivos en general, liderado por el rendimiento del ganado en pie, aunque el porcino magro se quedó rezagado.