Las crecientes tensiones geopolíticas corren el riesgo de convertirse en otra fuerza para la divergencia global, de acuerdo con un informe difundido por el Foro Económico Mundial (FEM).
Al tiempo que la competencia entre Estados Unidos y China está aumentando, la creciente destreza militar de China está cambiando el equilibrio de poder en el Pacífico Occidental.
Estados Unidos está fortaleciendo alianzas centradas en el Pacífico en respuesta, más recientemente con el pacto de seguridad Australia–Reino Unido-Estados Unidos (AUKUS).
Otros estados, como Rusia y Turquía, también están mostrando una mayor capacidad y disposición para proyectar poder en el extranjero.
Mientras tanto, potencias globales y regionales clave están poniendo a prueba los límites del derecho internacional y la cooperación al realizar ejercicios militares en áreas tensas, como la frontera entre Rusia y Ucrania y el Estrecho de Taiwán.
Después de describir los casos anteriores, el mismo informe (The Global Risks Report 2022) destaca que la competencia se está intensificando en dimensiones y geografías más nuevas, como es evidente en la militarización y el uso de armas en el espacio y en los desarrollos en el ciberespacio, donde las tensiones ya agudas entre los gobiernos afectados por el ciberdelito y los gobiernos cómplices de su comisión seguirán aumentando.
Tensiones geopolíticas
También la competencia está aumentando en el ejercicio del “poder blando”.
Por ejemplo, según el informe, la diplomacia de vacunas, la estrategia de financiamiento externo y la recuperación económica de China (se espera que su economía haya crecido 8% anual en 2021) le han permitido continuar expandiendo su influencia en todo el mundo en desarrollo.
Brasil, Indonesia, México y Turquía se encuentran entre los principales compradores de vacunas chinas contra el Covid-19, y los pagos netos de la deuda a China aumentaron 62% en 2020.
Los países en desarrollo pueden buscar cada vez más en China apoyo financiero, tecnológico y científico para prosperar en la economía pos-pandemia.
Las tensiones geopolíticas se están extendiendo a la esfera económica.
Por ejemplo, India y Japón implementaron políticas proteccionistas durante la pandemia.
Finalmente, el informe agrega que las empresas occidentales en sectores sensibles como la tecnología están encontrando crecientes dificultades para hacer negocios en China y Rusia, y los propios países occidentales están restringiendo.