El secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, declaró este jueves que espera que el gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, notifique formalmente la próxima semana al Congreso de su país que planea renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Una vez que el Congreso autorice ello, debe trascurrir un periodo de consulta de 90 días para que los funcionarios de la administración de Trump puedan arrancar las negociaciones con México y Canadá.
La legislación de Estados Unidos establece un procedimiento especial llamado Autoridad de Promoción Comercial (TPA), que requiere la aprobación de la Cámara de Representantes y el Senado.
Durante más de 30 años, el Congreso ha otorgado la TPA para guiar a las administraciones demócratas y republicanas en la búsqueda de acuerdos comerciales.
La TPA no provee nuevo poder al Ejecutivo, sino que es un procedimiento legislativo, escrito por el Congreso, a través del cual éste define los objetivos de negociación de Estados Unidos y describe un proceso de supervisión y consulta durante las negociaciones comerciales.
El proceso para aprobar la TPA requiere 90 días y si se niega, las posibilidades de éxito de cualquier negociación disminuyen seriamente, ya que la administración en curso no puede garantizar que los resultados de la negociación serán aprobados por el Legislativo en sus términos.
La TPA establece los requisitos del Congreso para que la administración notifique y consulte con el Congreso, el sector privado y otras partes interesadas durante las negociaciones de los acuerdos comerciales.
También define los términos, condiciones y procedimientos bajo los cuales el Congreso permite a la Administración celebrar acuerdos comerciales y establece los procedimientos para la consideración por el Congreso de los proyectos de ley para implementar los acuerdos.