En los tres días de ciberataque se registran más de 200,000 afectados, principalmente empresas, en al menos 150 países, y los daños podrían seguir este lunes, informó la Policía de la Unión Europea (Europol).
Como parte de sus primeras investigaciones, la Europol consideró que el ciberataque, el mayor que ha registrado, es obra de criminales, no de terroristas.
El ciberataque global de ransomware es un tipo de código malicioso que cifra los ficheros del ordenador a modo de rehén para solicitar un rescate económico.
Un ransomware (del inglés ransom, rescate, y ware, por software) es un tipo de programa informático malintencionado que restringe el acceso a determinadas partes o archivos del sistema infectado, y pide un rescate a cambio de quitar esta restricción.
El software malicioso, que exige un pago en la moneda digital Bitcoin para recuperar el acceso a los ordenadores, golpeó a centros de salud en el Reino Unido, grandes empresas en Francia y España, la red ferroviaria en Alemania, organismos públicos en Rusia y universidades en China, entre otros.
Rob Wainwright, director de la Policía comunitaria, advirtió que el sector sanitario es especialmente vulnerable a ataques de este tipo en muchos países.
«Todos los sectores son vulnerables y deben tomarse absolutamente en serio la necesidad de funcionar con sistemas actualizados e instalar todos los parches disponibles», agregó en una entrevista con el canal británico ITV.