Volkswagen informó que extendió la suspensión de operaciones en México al 1 de junio.
«El programa de reinicio de actividades en la armadora se dará bajo estrictas medidas de higiene, y de acuerdo a los requerimientos que señalen las autoridades de salud», dijo Volkswagen en un comunicado.
El pasado 5 de mayo, la Asociación de Fabricantes de Motores y Equipos (MEMA, por su sigla en inglés) de Estados Unidos pidió al gobierno de Estados Unidos presionar para que México reanude sus actividades de manufactura automotriz a partir del 12 de mayo.
Bill Long, presidente y director general de MEMA, hizo esta petición a Mike Pompeo, secretario de Estado, en una carta firmada ese día.
El 12 de mayo se adelantará un poco a la apertura prevista para el 18 de mayo de numerosas plantas de ensamblaje de Estados Unidos, lo cual es un paso esencial para permitir que se produzca el equipo original en esa fecha.
Previamente, Volkswagen había anunciado el reinicio de actividades en sus plantas de Puebla y Silao, en Guanajuato, para el 18 de mayo.
En México, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el 23 de marzo de 2020 que el país había entrado en la fase dos, denominada contagio comunitario, de la pandemia.
Volkswagen y COVID-19
También el 24 de marzo de 2020, el gobierno mexicano impuso restricciones a las actividades no esenciales en los sectores público, privado y social, que se extendieron hasta el 30 de mayo a partir del 16 de abril, incluida la suspensión de reuniones de más de 100 personas, el cierre de todas las escuelas y alentando al sector privado a permitir que los empleados trabajen de forma remota.
Las actividades esenciales incluyen servicios y suministros médicos, seguridad pública, funciones económicas fundamentales, programas sociales gubernamentales e infraestructura crítica. El 30 de marzo de 2020, el gobierno declaró una emergencia sanitaria nacional.