La empresa alemana Volkswagen superó a la japonesa Toyota como la mayor automotriz del mundo en 2016, y podría alcanzar por primera vez la supremacía global si los resultados de General Motors quedan por debajo de los suyos.
Con sede en Wolfsburgo, Baja Sajonia, Volkswagen logró ventas por 10.31 millones de unidades en el año pasado, mientas que las de Toyota fueron por 10.175 millones.
General Motors difundirá sus resultados anuales la próxima semana.
El nombre Volkwagen se debe a que en Alemania, en la década de 1930, surgió el proyecto de construir un automóvil que fuese accesible para un gran número de personas. Cuando Adolf Hitler se alzó con el poder en 1933, decidió poner en marcha un plan de fomento de la industria del automóvil, con el objetivo de relanzar sus fábricas y hacerlas más competitivas frente a las inglesas y las francesas.
De este modo, se realizó un concurso entre los empresarios para la concesión de la fabricación del denominado “automóvil del pueblo” (Volkswagen). Ferdinand Porsche fue el encargado de llevar a cabo el proyecto cuyo fin era construir un vehículo sencillo y barato que pudiese estar al alcance de la mayoría de los alemanes.