Las características de la web 3.0 evidencian la creciente influencia de la inteligencia artificial en el marketing digital a escala global.
Como punto de partida: la web 3.0 es la tercera generación de servicios de Internet para sitios web y aplicaciones que se centra en el uso de una comprensión de los datos basada en máquinas para proporcionar aprendizaje automático, big data, tecnología de contabilidad descentralizada, inteligencia artificial y web semántica.
El objetivo final de la web 3.0 es crear sitios web más inteligentes, conectados y abiertos.
Al respecto, SmartCard Marketing Systems, una empresa aceleradora de Fintech y Paytech, destaca que para lograr un estatus de nicho que brinde tecnología central y permita la web 3.0, la Banca 4.0 y un verdadero ecosistema digital con un recorrido fluido para el cliente, debe representar a un defensor del cambio.
Con el uso de la web 3.0, esta empresa opera como proveedor de aplicaciones y soluciones de software de comercio electrónico, nube y movilidad para la industria de pagos global.
Web 3.0
Otro caso es el de Ai Advertising, una empresa de AdTech de próxima generación que aprovecha el poder de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático para crear software para los líderes de marketing de hoy.
Su producto estrella, Campaign Performance Platform, es la primera solución de gestión de anuncios de extremo a extremo alojada en la nube del sector. La plataforma permite a las marcas orientar, predecir, crear, escalar y medir fácilmente campañas hiperpersonalizadas.
Esta plataforma utiliza inteligencia artificial para gestionar “personas” que la empresa considera que ahora serán más importantes que nunca para fines de segmentación, sobre todo cuando las cookies “están muertas”.
Además, su uso de personas superará otro desafío para la industria de publicidad dirigida creada por Apple tan pronto como lance su próximo sistema operativo que pedirá a los usuarios que opten por compartir su ubicación en cada aplicación móvil. Como resultado, los datos de ubicación disminuirán significativamente hasta el punto de que no serán escalables.
En la misma línea, la plataforma de la empresa Zeta Global Holdings Corp. (Zeta) está basada en datos e inteligencia artificial y permite a sus clientes transformar su estrategia de marketing digital, acelerar el crecimiento de sus ingresos y mejorar el retorno comercial.
Marketing digital
Zeta es una plataforma líder en la nube omnicanal basada en datos que proporciona a las empresas software de automatización de marketing e inteligencia del consumidor.
La empresa capacita a sus clientes para dirigirse a los consumidores, conectarlos e involucrarlos a través de software que ofrece marketing personalizado en todos los canales direccionables, incluidos correo electrónico, redes sociales, web, chat, TV conectada y video, entre otros.
Su Zeta Marketing Platform (ZMP) puede analizar miles de millones de puntos de datos estructurados y no estructurados para predecir la intención del consumidor aprovechando sofisticados algoritmos de aprendizaje automático y el conjunto de datos más grande de la industria para marketing omnicanal.
La ZMP actúa sobre estos conocimientos conectándose con los consumidores a través de la integración nativa de canales de marketing y la integración API (interfaz de programación de aplicaciones) con terceros.
Blockchain
Los algoritmos y procesos basados en datos de ZMP aprenden y optimizan el programa de marketing de cada cliente en tiempo real, produciendo un «efecto volante» que permite a los clientes de Zeta probar, aprender y mejorar sus programas de marketing en tiempo real.
Mirando hacia atrás, la web 1.0 es la versión original de la web donde sólo había unos pocos proveedores de contenidos y muchos consumidores. La web 2.0 se centra en contenido creado por el usuario y entregado a través de plataformas (por ejemplo, redes sociales) que monetizan ese contenido.
Ahora bien, la web 3.0 opera a través de protocolos descentralizados que son la base de la tecnología blockchain y de criptomonedas. Estos son interoperables, perfectamente integrados y automatizados a través de contratos inteligentes que se utilizan para impulsar múltiples aplicaciones y transacciones. Se espera que se base en los conceptos centrales de descentralización, apertura y mayor utilidad para el usuario.