El FMI revisó en abril al alza su estimación del crecimiento del PIB de la zona euro para 2023 a 0.8%, desde su estimación de 0.7% en su reporte de enero de 2022.
Destaca la heterogeneidad entre países de la región. Por ejemplo, para España el crecimiento anual real estimado es de 1.5% y para Alemania de -0.1 por ciento.
Por otra parte, para Reino Unido se anticipa una caída de 0.3% con cierta probabilidad de entrar en recesión.
Para 2024, el FMI espera un crecimiento del PIB de la zona del euro de 1.4% y de 1% para el Reino Unido.
En 2022, la actividad económica en la zona del euro sorprendió al alza con un crecimiento real del PIB de 3.5%, a pesar de la desaceleración de la segunda mitad del año por el impacto de la guerra en Ucrania y las sanciones impuestas a Rusia.
De acuerdo con la SHCP de México, la resiliencia de la actividad económica se explicó por un invierno más cálido al anticipado que permitió abastecer los inventarios de gas natural y contribuyó a reducir la presión en los precios de los energéticos.
Aunado a ello, la producción industrial no intensiva en energía (i.e. vehículos, maquinaria y equipo) creció más de lo esperado conforme se normalizaron las disrupciones en las cadenas globales de valor, mientras que los generosos apoyos fiscales a las empresas y hogares mitigaron el impacto de los altos precios de la electricidad y el gas natural.
Zona euro
La inflación general de la zona del euro disminuyó del máximo de 10.6% anual en octubre de 2022 a una tasa anual de 8.5% en febrero de 2023, principalmente por la caída en los precios de energéticos.
Por su parte, la inflación subyacente fue más persistente con una tasa que aumentó de 5.0% a 5.6% en el mismo periodo, debido al incremento en los costos salariales en el sector servicios y una mayor demanda de servicios intensivos en contacto físico.
Entre septiembre de 2021 y enero de 2023, la Unión Europea otorgó un total de 646,000 millones de euros en apoyos gubernamentales, de los cuales el 41% provino de Alemania (7.4% de su PIB), seguido de Italia (5.2% de su PIB) y Francia (3.7% de su PIB).
Entre las medidas de apoyo se encuentran subsidios a la vivienda, exenciones fiscales a los hogares y a empresas intensivas en energía, transferencias a los hogares, así como la nacionalización de empresas energéticas.
Si bien las expectativas de crecimiento anticipan que en 2023 el ritmo de crecimiento económico de la zona euro disminuirá como consecuencia del endurecimiento de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), los indicadores adelantados prevén que la actividad económica se mantendrá resiliente debido a las políticas gubernamentales para limitar los precios de electricidad y los menores precios de los energéticos.
En este sentido, en el primer trimestre de 2023 el PMI compuesto se ubicó en terreno de expansión, después una segunda mitad del año en contracción durante 2022, apoyado principalmente por el sector servicios.